Text 34
kṛṣṇa-kara-pada-tala, koṭi-candra-suśītala,
tāra sparśa yena sparśa-maṇi
tāra sparśa nāhi yāra, se yāuk chārakhāra,
sei vapu lauha-sama jāni
kṛṣṇa—del Señor Kṛṣṇa; kara—las palmas; pada-tala—las plantas de Sus pies; koṭi-candra—como la luz de millones de lunas; su-śītala—frescas y agradables; tāra—de ellas; sparśa—el tacto; yena—como; sparśa-maṇi—piedra de toque; tāra—su; sparśa—tacto; nāhi—no; yāra—de quien; se—esa persona; yāuk—que vaya; chārakhāra—a arruinar; sei vapu—ese cuerpo; lauha-sama—como el hierro; jāni—Yo sé.
«Las palmas de las manos de Kṛṣṇa y las plantas de Sus pies son tan frescas y agradables que sólo se pueden comparar con la luz de millones de lunas. Quien ha tocado esas manos y esos pies, ha probado realmente los efectos de la piedra de toque. Quien no los ha tocado, ha desperdiciado su vida, y su cuerpo es como el hierro.»