Text 135
eta śuni’ purī-gosāñi paricaya dila
kṣīra diyā pūjārī tāṅre daṇḍavat haila
eta śuni’—al escuchar esto; purī-gosāñi—Mādhavendra Purī; paricaya—presentación; dila—dio; kṣīra diyā—tras entregar el cuenco de arroz dulce; pūjārī—el sacerdote; tāṅre—a él; daṇḍavat haila—ofreció reverencias.
Al escuchar aquella invitación, Mādhavendra Purī salió y se identificó. El sacerdote le entregó entonces el cuenco de arroz dulce y le ofreció reverencias, tendiéndose en el suelo ante él.
SIGNIFICADO: No es de esperar que los brāhmaṇas ofrezcan reverencias a nadie tendidos en el suelo, pues se les considera la casta más alta. Sin embargo, los brāhmaṇas ofrecen daṇḍavats cuando ven a un devoto. Este sacerdote brāhmaṇa no preguntó a Mādhavendra Purī si era brāhmaṇa o no, pero cuando vio que Mādhavendra Purī era un devoto tan auténtico que el mismo Kṛṣṇa robaba para él, comprendió de inmediato la posición del santo. Como afirma Śrī Caitanya Mahāprabhu: kibā vipra, kibā nyāsī, śūdra kene naya/ yei kṛṣṇa-tattva-vettā, sei ‘guru’ haya (Cc. Madhya 8.128). Si el sacerdote brāhmaṇa hubiera sido un brāhmaṇa corriente, Gopīnātha no habría hablado con él en sueños. Puesto que la Deidad había hablado en sueños tanto a Mādhavendra Purī como al sacerdote brāhmaṇa, prácticamente hablando los dos estaban al mismo nivel. Sin embargo, como Mādhavendra Purī era un sannyāsī vaiṣṇava mayor, un paramahaṁsa, el sacerdote se postró inmediatamente ante él y le ofreció reverencias.