Text 9
śrīmad-dīrgha-catur-bāhuṁ
tapta-kāñcana-kuṇḍalam
kṣatajākṣaṁ gadā-pāṇim
ātmanaḥ sarvato diśam
paribhramantam ulkābhāṁ
bhrāmayantaṁ gadāṁ muhuḥ
śrīmat—adornado; dīrgha—prolongados; catuḥ-bāhum—de cuatro manos; tapta-kāñcana—oro fundido; kuṇḍalam—pendientes; kṣataja-akṣam—ojos rojos como la sangre; gadā-pāṇim—mano con una maza; ātmanaḥ—propio; sarvataḥ—todo; diśam—alrededor; paribhramantam—yendo de un lado a otro; ulkābhām—como estrellas fugaces; bhrāmayantam—circundante; gadām—la maza; muhuḥ—constantemente.
El Señor estaba adornado con cuatro manos, pendientes de oro fundido, y ojos furiosos, rojos como la sangre. Mientras se movía de un lado a otro, Su maza giraba constantemente a Su alrededor, como una estrella fugaz.
SIGNIFICADO: En la Brahma-saṁhitā (cap. 5) se dice que el Supremo Señor Govinda, mediante Su porción plenaria, entra en el halo del universo y se distribuye como Paramātmā, o la Superalma, no solo dentro del corazón de cada ser viviente, sino también dentro de cada uno de los átomos de los elementos materiales. De modo que, el Señor está dentro y fuera de todo en virtud de Su potencia inconcebible, y fue así que entró en el vientre de Uttarā a salvar a Su amado devoto Mahārāja Parīkṣit. En el Bhagavad-gītā (9.31), el Señor le aseguró a todo el mundo que Sus devotos nunca serán vencidos. Nadie puede matar a un devoto del Señor, porque el Señor lo protege, y nadie puede salvar a una persona a la que el Señor desee matar. El Señor es todopoderoso y, por consiguiente, puede tanto salvar como matar a voluntad. Él se le hizo visible a Su devoto Mahārāja Parīkṣit incluso en esa difícil posición (en el vientre de su madre), en la forma precisamente indicada para la visión de él. El Señor puede volverse más grande que miles de universos, y al mismo tiempo más pequeño que un átomo. Misericordioso como es, se vuelve justamente adecuado para la visión del limitado ser viviente. Él es ilimitado. A Él no lo limita ninguna medida de nuestros cálculos. Él puede volverse más grande que lo que podemos imaginar, y más pequeño que lo que podemos concebir. Pero, en todas las circunstancias, Él es el mismo Señor todopoderoso. No hay ninguna diferencia entre el Viṣṇu tamaño pulgar del vientre de Uttarā y el Nārāyaṇa de cuerpo completo que se encuentra en Vaikuṇṭha-dhāma, el Reino de Dios. Él acepta la forma de arcā-vigraha (la Deidad venerable) solo pare recibir el servicio que le presten Sus diferentes devotos ineptos. Por la misericordia del arcā-vigraha —la forma del Señor hecha de elementos materiales—, los devotos que están en el mundo material pueden acercarse fácilmente al Señor, si bien los sentidos materiales no pueden concebirlo. El arcā-vigraha es, por lo tanto, una forma del Señor completamente espiritual, que los devotos materiales pueden percibir; ese arcā-vigraha del Señor nunca debe considerarse material. Para el Señor no hay diferencia entre la materia y el espíritu, si bien hay un abismo entre los dos en el caso del ser viviente condicionado. Para el Señor no hay nada más que existencia espiritual, e, igualmente, para el devoto puro del Señor no hay nada que no sea existencia espiritual, en su íntima relación con el Señor.