Text 13
tat sarvaṁ naḥ samācakṣva
pṛṣṭo yad iha kiñcana
manye tvāṁ viṣaye vācāṁ
snātam anyatra chāndasāt
tat—eso; sarvam—todo; naḥ—a nosotros; samācakṣva—explica claramente; pṛṣṭaḥ—preguntado; yat iha—aquí; kiñcana—todo lo que; manye—pensamos; tvām—tú; viṣaye—en todos los temas; vācām—significados de palabras; snātam—plenamente familiarizado; anyatra—excepto; chāndasāt—porción de los Vedas.
Nosotros sabemos que, con la excepción de algunas porciones de los Vedas, tú eres experto en los significados de todas las materias y, por consiguiente, puedes explicar claramente las respuestas a todas las preguntas que acabamos de hacerte.
SIGNIFICADO: La diferencia que hay entre los Vedas y los Purāṇas es como la que hay entre los brāhmaṇas y los parivrājakas. Los brāhmaṇas tienen la función de ejecutar algunos sacrificios fruitivos que se mencionan en los Vedas, pero los parivrājakācāryas, o predicadores eruditos, tienen la función de trasmitirle el conocimiento trascendental a todo el mundo, sin excepción. En consecuencia, los parivrājakācāryas no siempre son expertos en pronunciar los mantras védicos, que los brāhmaṇas que tienen la función de ejecutar los ritos védicos practican de forma sistemática mediante las reglas de la métrica y el acento. Sin embargo, no se debe considerar que los brāhmaṇas son más importantes que los predicadores errantes. Ambos grupos son simultáneamente uno y diferentes, pues sus respectivas funciones persiguen un mismo objetivo, aunque de diferentes maneras.
Tampoco existe ninguna diferencia entre los mantras védicos y lo que se explica en los Purāṇas y en los Itihāsas. Según Śrīla Jīva Gosvāmī, en el Mādhyandina-śruti se dice que todos los Vedas, es decir, el Sāma, el Atharva, el Ṛg, el Yajur, los Purāṇas, los Itihāsas, los Upaniṣads, etc., son emanaciones de la respiración del Ser Supremo. La única diferencia estriba en que la mayoría de los mantras védicos comienzan con praṇava oṁkāra, y que la práctica de la pronunciación métrica de los mantras védicos requiere de cierto entrenamiento. Pero esto no quiere decir que el Śrīmad-Bhāgavatam tenga menos importancia que los mantras védicos. Por el contrario, es el fruto maduro de todos los Vedas, como se declaró anteriormente. Además, Śrīla Śukadeva Gosvāmī, la más perfectamente liberada de todas las almas, está absorto en el estudio del Bhāgavatam, a pesar de que ya se encuentra autorrealizado. Śrīla Sūta Gosvāmī está siguiendo sus pasos y, por lo tanto, su posición no es de menos importancia en absoluto, por el hecho de que no fuera experto en la recitación de los mantras védicos siguiendo las reglas de la métrica en su pronunciación, lo cual depende más de la práctica que de la verdadera comprensión. La comprensión perfecta es más importante que recitar como loros.