Text 10
na yad vacaś citra-padaṁ harer yaśo
jagat-pavitraṁ pragṛṇīta karhicit
tad vāyasaṁ tīrtham uśanti mānasā
na yatra haṁsā niramanty uśik-kṣayāḥ
na—no; yat—ese; vacaḥ—vocabulario; citra-padam—decorativo; hareḥ—del Señor; yaśaḥ—glorias; jagat—universo; pavitram—santificado; pragṛṇīta—descrito; karhicit—apenas; tat—ese; vāyasam—cuervos; tīrtham—lugar de peregrinaje; uśanti—creen; mānasāḥ—personas santas; na—no; yatra—donde; haṁsāḥ—seres completamente perfectos; niramanti—sienten placer; uśik-kṣayāḥ—aquellos que residen en la morada trascendental.
Las personas santas consideran que aquellas palabras que no describen las glorias del Señor, que es el único que puede santificar la atmósfera del universo entero, son como un lugar de peregrinaje para cuervos. Puesto que las personas completamente perfectas son habitantes de la morada trascendental, no encuentran allí ningún placer.
SIGNIFICADO: Los cuervos y los cisnes no son pájaros del mismo plumaje, debido a sus diferentes actitudes mentales. Se dice que los trabajadores fruitivos se asemejan a los cuervos, mientras que las personas santas y completamente perfectas se asemejan a los cisnes. Los cuervos sienten placer en un lugar donde se arroja basura, tal como los apasionados trabajadores fruitivos encuentran placer en el vino, las mujeres y los sitios destinados a la complacencia burda de los sentidos. Los cisnes no encuentran placer en los lugares en que los cuervos se reúnen para sus conferencias y asambleas. Por el contrario, a los cisnes se les ve en la atmósfera de belleza escénica natural, en que hay transparentes estanques de agua, hermosamente decorados con tallos de flores de loto de una variedad de colores de belleza natural. Esa es la diferencia entre las dos clases de aves.
La naturaleza ha influenciado a las diferentes especies de vida con diferentes mentalidades, y no es posible clasificarlas a todas en una misma categoría.
De igual modo, hay diferentes clases de literatura para diferentes tipos de hombres de diferentes mentalidades. La mayoría de las veces, la literatura del mercado que atrae a los hombres de la categoría de los cuervos, es la literatura que contiene los rechazados remanentes de los temas sensuales. Por lo general, esas obras se conocen como conversaciones mundanas relacionadas con el cuerpo burdo y la mente sutil.
Toda esa literatura está llena de temas descritos en lenguaje florido, plagado de símiles y arreglos metafóricos mundanos. Mas, a pesar de todo eso, no glorifica al Señor. Semejante poesía y prosa, sea cual fuere su tema, se considera adorno para un cuerpo muerto. Los hombres adelantados espiritualmente y que se asemejan a los cisnes no encuentran placer en esa literatura muerta, la cual es fuente de placer para hombres que están muertos espiritualmente. Esa literatura influenciada por las modalidades de la pasión y la ignorancia es distribuida con diferentes rótulos, pero difícilmente puede aliviar el anhelo espiritual del ser humano, y por eso los hombres que son como cisnes y que están adelantados espiritualmente no tienen nada que ver con ella. Esos hombres adelantados espiritualmente reciben también el nombre de mānasa, debido a que siempre siguen la pauta del servicio trascendental y voluntario que se le presta al Señor en el plano espiritual. Esto prohíbe totalmente las actividades fruitivas para la crasa satisfacción corporal de los sentidos o la especulación sutil de la mente material y egoísta.
Los literatos sociales, los científicos, los poetas mundanos, los filósofos teóricos y los políticos que están completamente absortos en el avance material del placer de los sentidos, son todos títeres de la energía material. Ellos encuentran placer en un lugar en donde se arrojan los temas desechados. Según Svāmi Śrīdhara, ese es el placer de los cazadores de prostitutas.
Pero los paramahaṁsas, quienes han captado la esencia de las actividades humanas, disfrutan de la literatura que describe las glorias del Señor.