Text 25
ucchiṣṭa-lepān anumodito dvijaiḥ
sakṛt sma bhuñje tad-apāsta-kilbiṣaḥ
evaṁ pravṛttasya viśuddha-cetasas
tad-dharma evātma-ruciḥ prajāyate
ucchiṣṭa-lepān—los remanentes de los alimentos; anumoditaḥ—con el permiso; dvijaiḥ—de los brāhmaṇas vedantistas; sakṛt—una vez; sma—en el pasado; bhuñje—tomé; tat—por esa acción; apāsta—eliminado; kilbiṣaḥ—todos los pecados; evam—así pues; pravṛttasya—estando ocupado; viśuddha-cetasaḥ—de aquel cuya mente está purificada; tat—esa particular; dharmaḥ—naturaleza; eva—indudablemente; ātma-ruciḥ—atracción trascendental; prajāyate—se manifestó.
Solo una vez, con el permiso de ellos, tomé los remanentes de su comida y, por hacerlo, todos mis pecados fueron erradicados de inmediato. Ocupado de esa manera, mi corazón se purificó, y en ese momento la naturaleza misma del trascendentalista se me hizo atractiva.
SIGNIFICADO: La devoción pura es, en un buen sentido, tan infecciosa como las enfermedades infecciosas. Un devoto puro está libre de toda clase de pecados. La Personalidad de Dios es la entidad más pura de todas, y a menos que uno esté igualmente purificado de la infección de las cualidades materiales, no puede convertirse en un devoto puro del Señor. Los bhakti-vedāntas, como se dijo anteriormente, eran devotos puros, y por asociarse con ellos y por comer una vez los remanentes de la comida de ellos, el niño se contagió de sus cualidades de pureza. Esa clase de remanentes pueden tomarse incluso sin el permiso de los devotos puros. Existen a veces pseudodevotos, y uno debe cuidarse mucho de ellos. Hay muchas cosas que le impiden a uno participar en el servicio devocional, pero en virtud de la asociación de los devotos puros todos esos obstáculos son eliminados. El devoto neófito se enriquece de manera práctica con las cualidades trascendentales del devoto puro, lo cual significa sentir atracción por el nombre, la fama, la calidad, los pasatiempos, etc., de la Personalidad de Dios. Contagiarse de las cualidades del devoto puro significa absorber el gusto de la devoción pura, siempre en relación con las trascendentales actividades de la Personalidad de Dios. Ese gusto trascendental hace que de inmediato todas las cosas materiales se vuelvan desagradables. Por consiguiente, un devoto puro no siente atracción en absoluto por las actividades materiales. Después de eliminar todos los pecados u obstáculos del sendero del servicio devocional, uno puede sentirse atraído, tener constancia, gusto perfecto, emociones trascendentales y, por último, uno puede situarse en el plano del servicio amoroso del Señor. Todas esas etapas se desarrollan por medio de la asociación de devotos puros, y ese es el significado de esta estrofa.