Texts 4-5
eke tam anurundhānā
jñātayaḥ paryupāsate
hateṣu ṣaṭsu bāleṣu
devakyā augraseninā
saptamo vaiṣṇavaṁ dhāma
yam anantaṁ pracakṣate
garbho babhūva devakyā
harṣa-śoka-vivardhanaḥ
eke—algunos de ellos; tam—a Kaṁsa; anurundhānāḥ—acomodándose a su política; jñātayaḥ—familiares; paryupāsate—concordaron con él; hateṣu—habiendo sido matados; ṣaṭsu—seis; bāleṣu—hijos; devakyāḥ—nacidos de Devakī; augraseninā—por el hijo de Ugrasena (Kaṁsa); saptamaḥ—el séptimo;vaiṣṇavam—del Señor Viṣṇu; dhāma—una expansión plenaria; yam—a quien; anantam—con el nombre de Ananta; pracakṣate—es glorificado; garbhaḥ—embrión; babhūva—hubo; devakyāḥ—de Devakī; harṣa-śoka-vivardhanaḥ—causando placer y lamentación a la vez.
Sin embargo, algunos de sus familiares comenzaron a seguir los principios de Kaṁsa y se ocuparon en servirle. Una vez que Kaṁsa, el hijo de Ugrasena, hubo matado a los seis hijos de Devakī, una porción plenaria de Kṛṣṇa puso a Devakī entre la dicha y la lamentación entrando en su vientre para ser su séptimo hijo. Los grandes sabios glorifican a esa expansión plenaria con el nombre de Ananta, que pertenece a la segunda expansión cuádruple de Kṛṣṇa.
SIGNIFICADO: Akrūra y otros devotos importantes se quedaron con Kaṁsa para satisfacerle. Tenían sus razones. Todos ellos esperaban que la Suprema Personalidad de Dios naciese como octavo hijo de Devakī tan pronto como Kaṁsa matase a sus demás hijos, y aguardaban ansiosamente Su venida. Si se quedaban con Kaṁsa, podrían ver el nacimiento y los pasatiempos infantiles de la Suprema Personalidad de Dios. Akrūra, más tarde, iría a Vṛndāvana para traer a Kṛṣṇa y a Balarāma a Mathurā. La palabra paryupāsate es significativa, porque indica que algunos devotos prefirieron quedarse con Kaṁsa para ver todos esos pasatiempos del Señor. En el pasado, los seis niños matados por Kaṁsa habían nacido de Marīci, pero, debido a la maldición de un brāhmaṇa, tuvieron que nacer de nuevo como nietos de Hiraṇyakaśipu. Kaṁsa había nacido entonces como Kālanemi, y ahora se veía obligado a matar a sus propios hijos. Todo ello era un misterio. Tan pronto como fueron matados, los hijos de Devakī regresaron al lugar de donde procedían originalmente. También esto despertaba la curiosidad de los devotos. Por lo general, nadie mata a sus propios sobrinos, pero Kaṁsa era tan cruel que no titubeaba en hacerlo. Ananta, Saṅkarṣaṇa, pertenece al segundo catur-vyūha, la segunda expansión cuádruple. Así lo explican los comentaristas expertos.