Text 37
eṣa ātma-patho ’vyakto
naṣṭaḥ kālena bhūyasā
taṁ pravartayituṁ deham
imaṁ viddhi mayā bhṛtam
eṣaḥ—este; ātma-pathaḥ—sendero de autorrealización; avyaktaḥ—difícil de conocer; naṣṭaḥ—perdido; kālena bhūyasā—con el paso del tiempo; tam—este; pravartayitum—para introducir de nuevo; deham—cuerpo; imam—este; viddhi—ten presente, por favor; mayā—por Mí;bhṛtam—adoptado.
Ahora, con el paso del tiempo, este sendero de autorrealización, que es difícil de entender, se ha perdido. Ten presente, por favor, que he adoptado este cuerpo de Kapila para introducir y explicar de nuevo esta filosofía en la sociedad humana.
SIGNIFICADO: No es cierto que la filosofía sāṅkhya sea un sistema de filosofía nuevo presentado por Kapila de la misma manera que los filósofos materiales presentan nuevas clases de pensamiento especulativo mental para desbancar el de otro filósofo. A nivel material, todos, y en especial el especulador mental, tratan de destacar por encima de los demás. El campo de actividad de los especuladores es la mente; las diversas maneras en que se puede agitar la mente no conocen límite; se puede agitar ilimitadamente, y de ese modo puede exponerse una cantidad de teorías ilimitada. La filosofía sāṅkhya no es de esa clase; no es una especulación mental. Es real, pero en tiempos de Kapila se había perdido.
Con el paso del tiempo, un determinado tipo de conocimiento puede perderse, o puede quedar transitoriamente cubierto; así es la naturaleza del mundo material. En el Bhagavad-gītā, el Señor Kṛṣṇa ha hecho una afirmación parecida: sa kāleneha mahatā yogo naṣṭaḥ: «Con el paso del tiempo, el sistema de yoga, tal como se presenta en el Bhagavad-gītā, se ha perdido». Descendía en paramparā, en sucesión discipular, pero debido al paso del tiempo, se perdió. El factor tiempo ejerce tanta presión que, por su influencia, todo en este mundo se deteriora o se echa a perder. El sistema de yoga del Bhagavad-gītā se había perdido antes del encuentro entre Kṛṣṇa y Arjuna. Por eso Kṛṣṇa enunció de nuevo el mismo antiguo sistema de yoga, y Arjuna pudo entender correctamente el Bhagavad-gītā. De modo similar, Kapila también dijo que, en realidad, Él no era quien presentaba por primera vez la filosofía sāṅkhya; era una filosofía que ya estaba en vigor, pero que, misteriosamente, con el paso del tiempo se había perdido, y por eso Él advino para volver a exponerla. Ese es el objetivo de toda encarnación de Dios. Yadā yadā hi dharmasya glānir bhavati bhārata. Dharma significa «la verdadera ocupación de la entidad viviente». Cuando las entidades vivientes no actúan conforme a su ocupación eterna, el Señor viene a exponer la verdadera ocupación de la vida. Cualquier supuesto sistema religioso que no esté en la línea del servicio devocional recibe el nombre de adharma-saṁsthāpana. Cuando la gente olvida su relación eterna con Dios y se ocupa en algo distinto al servicio devocional, esa ocupación recibe el nombre de irreligión. La filosofía sāṅkhya expone cómo se puede salir de la miserable condición de la vida material, y el Señor está explicando personalmente ese sublime sistema.