Text 52
nārada uvāca
praśna evaṁ hi sañchinno
bhavataḥ puruṣarṣabha
atra me vadato guhyaṁ
niśāmaya suniścitam
nāradaḥ uvāca—Nārada dijo; praśnaḥ—la pregunta; evam—así; hi—ciertamente; sañchinnaḥ—respondida; bhavataḥ—tuya; puruṣa-ṛṣabha—¡oh, gran personalidad!; atra—aquí; me vadataḥ—mientras hablo; guhyam—confidencial; niśāmaya—escucha; su-niścitam—perfectamente confirmado.
El gran santo Nārada continuó: ¡Oh, gran personalidad!, he contestado adecuadamente a todo lo que me has preguntado. Ahora escucha otra narración, que es muy confidencial y que cuenta con la aprobación de las personas santas.
SIGNIFICADO: Śrī Nārada Muni está actuando como maestro espiritual del rey Barhiṣmān. Con sus instrucciones, Nārada Muni quería que el rey dejara inmediatamente de ocuparse en actividades fruitivas y emprendiera el sendero del servicio devocional. Sin embargo, el rey, a pesar de que lo había entendido todo, todavía no estaba dispuesto a abandonar el tipo de actividades en que estaba ocupado. Como se verá en los siguientes versos, el rey tenía el plan de hacer regresar a sus hijos, que estaban lejos del hogar ejecutando austeridades y penitencias. Cuando regresaran, les confiaría el reino y entonces abandonaría el hogar. Esa es la posición de la mayoría de las personas. Aceptan un maestro espiritual genuino y le escuchan, pero cuando el maestro espiritual les indica que deben abandonar el hogar para ocuparse íntegramente en servicio devocional, se muestran indecisos. El maestro espiritual tiene el deber de instruir al discípulo hasta que pueda entender que ese modo de vida materialista, el sendero de las actividades fruitivas, no es en absoluto beneficioso. En realidad, el servicio devocional debe practicarse desde el principio de la vida, como aconseja Prahlāda Mahārāja: kaumāra ācaret prājño dharmān bhāgavatān iha (Bhāg. 7.6.1). Según todas las instrucciones de los Vedas, debemos entender que, mientras no emprendamos el sendero de la conciencia de Kṛṣṇa y del servicio devocional, simplemente estaremos perdiendo el tiempo ocupados en las actividades fruitivas de la existencia material. Por esa razón, Nārada Muni decidió explicar al rey otra alegoría, a fin de inducirle a abandonar la vida familiar en la existencia material.