Text 19
ahaṁ ca yogeśvaram ātma-tattva-
vidāṁ munīnāṁ paramaṁ guruṁ vai
praṣṭuṁ pravṛttaḥ kim ihāraṇaṁ tat
sākṣād dhariṁ jñāna-kalāvatīrṇam
aham—yo; ca—y; yoga-īśvaram—el amo de todo poder místico; ātma-tattva-vidām—de los sabios eruditos que son conscientes de la ciencia espiritual; munīnām—de esas personas santas; paramam—el mejor; gurum—el preceptor; vai—en verdad; praṣṭum—para inquirir; pravṛttaḥ—ocupado; kim—qué; iha—en este mundo; araṇam—el refugio más seguro; tat—el cual; sākṣāt harim—directamente la Suprema Personalidad de Dios; jñāna-kalā-avatīrṇam—que ha descendido como la encarnación de conocimiento completo en Su porción plenaria conocida con el nombre de Kapiladeva.
Te considero el más perfecto amo del poder místico. Dominas la ciencia espiritual a la perfección. Eres el más glorioso entre los grandes sabios, y has descendido para beneficiar a toda la sociedad humana. Como has venido para dar conocimiento espiritual y eres un representante directo de Kapiladeva, la encarnación de Dios y porción plenaria del conocimiento, te pregunto, ¡oh, maestro espiritual!, ¿cuál es el refugio más seguro en este mundo?
SIGNIFICADO: En palabras de Kṛṣṇa en el Bhagavad-gītā:
yoginām api sarveṣāṁ
mad-gatenāntarātmanā
śraddhāvān bhajate yo māṁ
sa me yuktatamo mataḥ
«De todos los yogīs, aquel que tiene una gran fe y mora en Mí, piensa en Mí y Me ofrece servicio amoroso trascendental, es el que está más íntimamente unido a Mí en yoga y el más elevado de todos. Esa es Mi opinión» (Bg. 6.47).
Jaḍa Bharata era un yogī perfecto. En el pasado, había sido el emperador Bharata Mahārāja, y ahora era la personalidad más sublime entre los grandes sabios y el amo de todos los poderes místicos. Aunque era una entidad viviente común, Jaḍa Bharata había heredado todo el conocimiento presentado por la Suprema Personalidad de Dios, Kapiladeva. Por lo tanto, se le podía considerar directamente la Suprema Personalidad de Dios. Esto lo confirma Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura en sus estrofas en honor del maestro espiritual: sākṣād-dharitvena samasta-śāstraiḥ. Una personalidad excelsa de la talla de Jaḍa Bharata es como la Suprema Personalidad de Dios, pues representa plenamente al Señor en el conocimiento que da a los demás. En este verso se considera a Jaḍa Bharata el representante directo de la Suprema Personalidad de Dios, ya que estaba impartiendo conocimiento en nombre del Señor Supremo. Por esa razón, Mahārāja Rahūgaṇa llegó a la conclusión de que era adecuado preguntarle acerca de ātma-tattva, la ciencia espiritual. Tad-vijñānārthaṁ sa gurum evābhigacchet. Este mandamiento védico lo confirma también este verso. Cualquier persona interesada en conocer la ciencia espiritual (brahma jijñāsā) debe acudir a un guru como Jaḍa Bharata.