Text 7
dhyāyamānaḥ surāsuroraga-siddha-gandharva-vidyādhara-muni-gaṇair anavarata-mada-mudita-vikṛta-vihvala-locanaḥ sulalita-mukharikāmṛtenāpyāyamānaḥ sva-pārṣada-vibudha-yūtha-patīn aparimlāna-rāga-nava-tulasikāmoda-madhv-āsavena mādyan madhukara-vrāta-madhura-gīta-śriyaṁ vaijayantīṁ svāṁ vanamālāṁ nīla-vāsā eka-kuṇḍalo hala-kakudi kṛta-subhaga-sundara-bhujo bhagavān mahendro vāraṇendra iva kāñcanīṁ kakṣām udāra-līlo bibharti.
dhyāyamānaḥ—siendo el objeto de meditación de; sura—de semidioses; asura—demonios; uraga—serpientes; siddha—habitantes de Siddhaloka; gandharva—habitantes de Gandharvaloka; vidyādhara—vidyādharas; muni—y de grandes sabios; gaṇaiḥ—por grupos; anavarata—constantemente; mada-mudita—con las delicias de la embriaguez; vikṛta—moviéndose de un lugar a otro; vihvala—girando; locanaḥ—cuyos ojos; su-lalita—de excelente composición; mukharika—de palabras; amṛtena—con el néctar; āpyāyamānaḥ—complacer; sva-pārṣada—a Sus propios acompañantes; vibudha-yūtha-patīn—los jefes de los grupos de semidioses; aparimlāna—nunca apagado; rāga—cuyo lustre; nava—siempre frescas; tulasikā—de las flores de tulasī; āmoda—por la fragancia; madhu-āsavena—y la miel; mādyan—embriagadas;madhukara-vrāta—de las abejas; madhura-gīta—con el dulce canto; śrīyam—que se hace más hermoso; vaijayantīm—el collar de flores que recibe el nombre devaijayantī; svām—Su propio; vanamālām—collar de flores; nīla-vāsāḥ—cubierto con ropas azules; eka-kuṇḍalaḥ—llevando un solo pendiente; hala-kakudi—en la empuñadura de un arado; kṛta—puestas; subhaga—auspiciosas; sundara—hermosas; bhujaḥ—manos; bhagavān—de la Suprema Personalidad de Dios; mahā-indraḥ—el rey del cielo; vāraṇa-indraḥ—el elefante; iva—como; kāñcanīm—dorado; kakṣām—cinturón; udāra-līlaḥ—ocupado en pasatiempos trascendentales; bibharti—lleva.
Śukadeva Gosvāmī continuó: Los semidioses, los demonios, los uragas [semidioses con forma de serpiente], los siddhas, los gandharvas, los vidyādharas y muchos sabios gloriosos ofrecen constantes oraciones al Señor. Debido a la embriaguez, el Señor parece confuso, y Sus ojos, con aspecto de flores en todo su esplendor, se mueven inquietos. Él complace a Sus acompañantes personales, los semidioses principales, con los dulces sonidos que emanan de Su boca. Vestido con ropas azules y adornado con un solo pendiente, lleva sobre la espalda un arado, que sostiene con Sus dos manos, hermosas y bien formadas. Es tan blanco como Indra, el rey celestial, y ciñe Su cintura con un cinturón dorado; alrededor del cuello lleva un collar vaijayantī de flores de tulasī siempre frescas, cuya fragancia de miel embriaga a las abejas que zumban dulcemente a su alrededor, realzando cada vez más la belleza del collar. De ese modo, el Señor disfruta de Sus muy magnánimos pasatiempos.