Text 40
bhū-dvīpa-varṣa-sarid-adri-nabhaḥ-samudra-
pātāla-diṅ-naraka-bhāgaṇa-loka-saṁsthā
gītā mayā tava nṛpādbhutam īśvarasya
sthūlaṁ vapuḥ sakala-jīva-nikāya-dhāma
bhū—de este planeta Tierra; dvīpa—y otros sistemas planetarios; varṣa—de regiones; sarit—ríos; adri—montañas; nabhaḥ—el cielo; samudra—océanos; pātāla—planetas inferiores; dik—direcciones; naraka—los planetas infernales; bhāgaṇa-loka—los astros luminosos y los planetas superiores; saṁsthā—la situación; gītā—descritos; mayā—por mí; tava—para ti; nṛpa—¡oh, rey!;adbhutam—maravilloso; īśvarasya—de la Suprema Personalidad de Dios; sthūlam—denso; vapuḥ—cuerpo; sakala-jīva-nikāya—de todas las multitudes de entidades vivientes; dhāma—que es lugar de reposo.
Mi querido rey, hasta aquí he descrito para ti el planeta Tierra, además de otros sistemas planetarios y sus regiones [varṣas], junto con sus ríos y montañas. También te he hablado del cielo, los océanos, los sistemas planetarios inferiores, las direcciones, los sistemas planetarios infernales y las estrellas. Todo ello constituye el virāṭ-rūpa, la gigantesca forma material del Señor, en la que reposan las entidades vivientes. De ese modo te he explicado la maravillosa expansión del cuerpo externo del Señor.
Así terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo vigesimosexto del Canto Quinto del Śrīmad-Bhāgavatam, titulado: «Descripción de los planetas infernales».
—Acabado en el templo del Pañca-tattva, Honolulu, el 5 de junio de 1975—
Se añade una nota complementaria, que es la traducción de una nota escrita por Su Divina Gracia Bhaktisiddhānta Sarasvatī Gosvāmī Mahārāja Prabhupāda en su Gauḍīya-bhāṣya:
Los sabios eruditos que tienen conocimiento completo de las Escrituras védicas coinciden en señalar que las encarnaciones de la Suprema Personalidad de Dios son infinitas. Esas encarnaciones pueden dividirse en dos tipos: prābhava y vaibhava. Según las Escrituras, las encarnaciones prābhava, a su vez, pueden dividirse en dos clases: las que se denominan eternas, y las que no se describen con todo detalle. En este Quinto Canto del Śrīmad-Bhāgavatam, en los capítulos que van del tercero al sexto, se habla de Ṛṣabhadeva, aunque no se relatan por entero Sus actividades espirituales. Por lo tanto, se considera que pertenece al segundo tipo de encarnaciones prābhava. En el Śrīmad-Bhāgavatam (1.3.13), se dice
aṣṭame merudevyāṁ tu
nābher jāta urukramaḥ
darśayan vartma dhīrāṇāṁ
sarvāśrama-namaskṛtam
«En Su octava encarnación, el Señor Viṣṇu nació como hijo de Mahārāja Nābhi [el hijo de Āgnīdhra] y su esposa Merudevī, y enseñó la senda de la perfección, la etapa paramahaṁsa de la vida, adorada por todos los seguidores del varṇāśrama-dharma». Ṛṣabhadeva es la Suprema Personalidad de Dios, y Su cuerpo es espiritual (sac-cid-ānanda-vigraha). Por consiguiente, alguien podría preguntar cómo es posible que evacuase excremento y orina. El ācārya gauḍīya vedānta Baladeva Vidyābhūṣaṇa ha respondido a esa pregunta en su libro Siddhānta-ratna (Parte primera, versos 65-68). Hay hombres imperfectos que llaman la atención sobre el hecho de que Ṛṣabhadeva evacuase heces y orina, considerándolo un tema propio para el estudio de los no devotos, que no comprenden la posición espiritual de los cuerpos trascendentales. En este Quinto Canto del Śrīmad-Bhāgavatam(5.6.11), se describe perfectamente el estado de confusión e ilusión de los materialistas de esta era. En otro pasaje del Quinto Canto (5.5.19), Ṛṣabhadeva afirma: idaṁ śarīraṁ mama durvibhāvyam: «Mi cuerpo es inconcebible para los materialistas». Esto lo confirma también el Señor Kṛṣṇa en el Bhagavad-gītā (9.11):
avajānanti māṁ mūḍhā
mānuṣīṁ tanum āśritam
paraṁ bhāvam ajānanto
mama bhūta-maheśvaram
«Los necios se burlan de Mí cuando desciendo con forma humana. No conocen Mi naturaleza trascendental como Señor Supremo de todo cuanto existe». Es extraordinariamente difícil comprender la forma humana de la Suprema Personalidad de Dios; de hecho, para el hombre común es inconcebible. Por esa razón, Ṛṣabhadeva ha explicado directamente que Su propio cuerpo pertenece al plano espiritual. Siendo así, Ṛṣabhadeva en realidad no evacuaba heces y orina. Aunque aparentemente pareciera hacerlo, esa actividad también era trascendental, y ningún hombre corriente puede imitarla. En el Śrīmad-Bhāgavatam se afirma también que las heces y la orina de Ṛṣabhadeva desprendían una intensa fragancia trascendental. Es posible imitar a Ṛṣabhadeva, pero no podemos imitarle en su actividad de evacuar heces de aroma fragante.
Las actividades de Ṛṣabhadeva, por lo tanto, no respaldan las pretensiones de los arhat. Ese tipo de personas a veces se presentan como seguidores de Ṛṣabhadeva; pero, ¿cómo pueden ser seguidores de Ṛṣabhadeva si con sus actividades van en contra de los principios védicos? Śukadeva Gosvāmī explica que el rey de Koṅka, Veṅka y Kuṭaka, después de escuchar acerca de las características de Ṛṣabhadeva, dio inicio a un sistema de principios religiosos conocido con el nombre de arhat. Esos principios no coinciden con los principios védicos; por esa razón se dice que son pāṣaṇḍa-dharma. Los miembros de la comunidad arhatconsideran materiales las actividades de Ṛṣabhadeva. Sin embargo, Ṛṣabhadeva es una encarnación de la Suprema Personalidad de Dios; por consiguiente, está en el plano trascendental, y nadie puede compararse con Él.
Ṛṣabhadeva manifestó personalmente las actividades de la Suprema Personalidad de Dios. Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (5.6.8): dāvānalas tad vanam ālelihānaḥ saha tena dadāha: El final de los pasatiempos de Ṛṣabhadeva llegó con un incendio que redujo a cenizas un bosque entero y el cuerpo del Señor, que se encontraba en él. Del mismo modo, Ṛṣabhadeva redujo a cenizas la ignorancia de la gente. Cuando instruyó a Sus hijos, manifestó las características de un paramahaṁsa. Los principios de la comunidad arhat, sin embargo, no corresponden con las enseñanzas de Ṛṣabhadeva.
Śrīla Baladeva Vidyābhūṣaṇa subraya el hecho de que en el Octavo Canto del Śrīmad-Bhāgavatam existe otra descripción de Ṛṣabhadeva, pero que se trata de un Ṛṣabhadeva distinto del que habla este canto.
— Fin del Canto Quinto —