Text 34
śrī-yudhiṣṭhira uvāca
kīdṛśaḥ kasya vā śāpo
hari-dāsābhimarśanaḥ
aśraddheya ivābhāti
harer ekāntināṁ bhavaḥ
śrī-yudhiṣṭhiraḥ uvāca—Mahārāja Yudhiṣṭhira dijo; kīdṛśaḥ—qué clase de; kasya—cuya; vā—o; śāpaḥ—maldición; hari-dāsa—el sirviente de Hari; abhimarśanaḥ—superar; aśraddheyaḥ—increíble; iva—como si; ābhāti—parece; hareḥ—de Hari;ekāntinām—de aquellos consagrados exclusivamente como sirvientes excelsos; bhavaḥ—nacimiento.
Mahārāja Yudhiṣṭhira preguntó: ¿Qué clase de maldición fue esa, tan poderosa como para afectar incluso a unos viṣṇu-bhaktasliberados? ¿Qué clase de persona fue capaz de maldecir a unos sirvientes personales del Señor? Es imposible que unos devotos del Señor firmemente establecidos en su posición caigan al mundo material. No lo puedo creer.
SIGNIFICADO: En el Bhagavad-gītā (8.16), el Señor afirma claramente: mām upetya tu kaunteya punar janma na vidyate: Aquel que se purifica de la contaminación material y va de regreso al hogar, de vuelta a Dios, ya no regresa al mundo material. En otro pasaje del Bhagavad-gītā (4.9), Kṛṣṇa dice:
janma karma ca me divyam
evaṁ yo vetti tattvataḥ
tyaktvā dehaṁ punar janma
naiti mām eti so ’rjuna
«¡Oh, Arjuna!, aquel que conoce la naturaleza trascendental de Mi advenimiento y actividades, al abandonar el cuerpo no vuelve a nacer en este mundo material, sino que alcanza Mi morada eterna». Por esa razón, Mahārāja Yudhiṣṭhira se sorprendió de que un devoto puro pudiera regresar al mundo material. Ciertamente, se trata de una pregunta muy importante.