Text 36
virāgaḥ sarva-kāmebhyaḥ
śikṣito me madhu-vratāt
kṛcchrāptaṁ madhuvad vittaṁ
hatvāpy anyo haret patim
virāgaḥ—desapego; sarva-kāmebhyaḥ—de todos los deseos materiales; śikṣitaḥ—ha sido enseñado; me—a mí; madhu-vratāt—del abejorro; kṛcchra—con grandes dificultades; āptam—adquirido; madhu-vat—dulce como la miel; vittam—dinero; hatvā—matar; api—incluso; anyaḥ—otro; haret—se lleva; patim—al propietario.
Del abejorro he aprendido a estar desapegado de atesorar dinero, pues, aunque es dulce como la miel, cualquiera puede matar a su propietario y quitárselo.
SIGNIFICADO: Si un panal está lleno de miel, alguien irá y se la llevará por la fuerza. Por lo tanto, el que atesora dinero debe comprender que puede ser atacado por el gobierno o los ladrones, o incluso matado por sus enemigos. Las Escrituras dicen que, especialmente en esta era, Kali-yuga, son los mismos gobiernos quienes, en lugar de proteger el dinero de los ciudadanos, se valen del peso de la ley para quitárselo. Por esa razón, el brāhmaṇa erudito había decidido no atesorar dinero alguno. Solo debemos poseer lo necesario para afrontar las necesidades inmediatas. No hay por qué disponer de un gran capital, solo para vivir con el miedo de que el gobierno o los ladrones nos lo arrebaten.