Text 37
nyasta-krīḍanako bālo
jaḍavat tan-manastayā
kṛṣṇa-graha-gṛhītātmā
na veda jagad īdṛśam
nyasta—habiendo abandonado; krīḍanakaḥ—todas las distracciones o tendencias de juego infantiles; bālaḥ—un niño; jaḍa-vat—como inerte, sin actividades; tat-manastayā—por estar completamente absorto en Kṛṣṇa; kṛṣṇa-graha—por Kṛṣṇa, que es como una poderosa influencia (como una graha, una influencia planetaria); gṛhīta-ātmā—cuya mente estaba completamente atraída; na—no; veda—entendió; jagat—todo el mundo material; īdṛśam—de ese modo.
Prahlāda Mahārāja no mostró interés por los juegos infantiles ni en su más tierna infancia. De hecho, los rechazó por completo y permanecía silencioso y ajeno, pues estaba absorto por entero en el estado de conciencia de Kṛṣṇa. En su mente siempre estaba el influjo consciente de Kṛṣṇa, de modo que no alcanzaba a entender cómo podía seguir adelante el mundo, inmerso en actividades de complacencia de los sentidos.
SIGNIFICADO: Prahlāda Mahārāja es un ejemplo inmejorable de una gran personalidad completamente absorta en el estado de conciencia de Kṛṣṇa. En elCaitanya-caritāmṛta (Madhya 8.274), se dice:
sthāvara-jaṅgama dekhe, nā dekhe tāra mūrti
sarvatra haya nija iṣṭa-deva-sphūrti
La persona plenamente consciente de Kṛṣṇa, aunque permanezca en el mundo material, solamente ve a Kṛṣṇa, mire donde mire. Esto es característico del mahā-bhāgavata, quien, debido a su actitud de amor puro por Kṛṣṇa, ve a Kṛṣṇa en todas partes. Como se confirma en la Brahma-saṁhitā (5.38):
premāñjana-cchurita-bhakti-vilocanena
santaḥ sadaiva hṛdayeṣu vilokayanti
yaṁ śyāmasundaram acintya-guṇa-svarūpaṁ
govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi
«Yo adoro a Govinda, el Señor primigenio, a quien, en Su forma eterna de Śyāmasundara, ven siempre en sus corazones los devotos cuyos ojos están ungidos con el bálsamo del amor». Un devoto excelso, un mahātmā, persona muy difícil de encontrar, permanece siempre en perfecto estado de conciencia de Kṛṣṇa, y ve al Señor constantemente dentro de su corazón. Se dice a veces que la persona que está sometida a la influencia negativa de estrellas como Saturno, Rāhu o Ketu, no puede progresar en ninguna actividad que emprenda. Lo contrario le ocurría a Prahlāda Mahārāja, que recibía el influjo de Kṛṣṇa, el planeta supremo, de manera que no podía pensar en el mundo material, ni podía vivir sin conciencia de Kṛṣṇa. Esa es la característica del mahā-bhāgavata. Para el mahā-bhāgavata, incluso el enemigo de Kṛṣṇa está ocupado en servir a Kṛṣṇa. Se puede dar un ejemplo un tanto tosco: El enfermo de ictericia, todo lo ve amarillo. De manera similar, para elmahā-bhāgavata, todo el mundo, menos él mismo, está ocupado en servir a Kṛṣṇa.
Prahlāda Mahārāja es un mahā-bhāgavata reconocido, el devoto supremo. En el verso anterior se afirmó que sentía un apego natural (naisargikī ratiḥ). En este verso se explican las características de ese apego natural por Kṛṣṇa. Prahlāda Mahārāja no era más que un niño, pero, aun así, jugar no le atraía en lo más mínimo. Como afirma el Śrīmad-Bhāgavatam (11.2.42): viraktir anyatra ca: La característica del estado de perfecta conciencia de Kṛṣṇa es que se pierde el interés por todas las actividades materiales. A un niño pequeño le es imposible abandonar sus juegos, pero Prahlāda Mahārāja estaba situado en el plano más elevado del servicio devocional y estaba siempre absorto en el trance de conciencia de Kṛṣṇa. Del mismo modo que la persona materialista está siempre absorta en pensar en ganancias materiales, un mahā-bhāvagata como Prahlāda Mahārāja está siempre absorto en pensar en Kṛṣṇa.