Text 46
mauna-vrata-śruta-tapo-’dhyayana-sva-dharma-
vyākhyā-raho-japa-samādhaya āpavargyāḥ
prāyaḥ paraṁ puruṣa te tv ajitendriyāṇāṁ
vārtā bhavanty uta na vātra tu dāmbhikānām
mauna—silencio; vrata—votos; śruta—conocimiento védico; tapaḥ—austeridad; adhyayana—estudio de las Escrituras; sva-dharma—poner en práctica el varṇāśrama-dharma; vyākhyā—explicar los śāstras; rahaḥ—vivir en un lugar solitario; japa—cantar o recitar mantras; samādhayaḥ—permanecer en trance; āpavargyāḥ—estos son diez tipos de actividades para avanzar en la senda de la liberación; prāyaḥ—generalmente; param—el único medio; puruṣa—¡oh, mi Señor!; te—todos ellos; tu—pero; ajita-indriyāṇām—de personas que no pueden controlar los sentidos; vārtāḥ—medios de vida; bhavanti—son; uta—así se dice; na—no; vā—o; atra—en relación con esto; tu—pero; dāmbhikānām—de personas dominadas por el orgullo falso.
¡Oh, Suprema Personalidad de Dios!, en la senda de la liberación hay diez métodos prescritos: permanecer en silencio, sin hablar con nadie, observar votos, acumular toda clase de conocimientos védicos, someterse a austeridades, estudiar los Vedas y otros textos védicos, cumplir los deberes del varṇāśrama-dharma, explicar los śāstras, permanecer en un lugar solitario, cantar mantras en silencio, y absorberse en trance. Para aquellos que no han dominado sus sentidos, estos métodos de liberación generalmente no pasan de ser una práctica profesional y una forma de ganarse el sustento. A esas personas, debido a su orgullo falso, puede que esos procedimientos no las conduzcan al éxito.
SIGNIFICADO: Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (6.1.15):
kecit kevalayā bhaktyā
vāsudeva-parāyaṇāḥ
aghaṁ dhunvanti kārtsnyena
nīhāram iva bhāskaraḥ
«Raro es hallar a una persona que haya emprendido el servicio devocional de Kṛṣṇa de modo completo y puro; solo ella puede arrancar las malas hierbas de la acción pecaminosa sin posibilidad de que revivan. Para hacerlo, le basta con ocuparse en servicio devocional, del mismo modo que el Sol puede disipar la niebla con sus rayos». El verdadero objetivo de la vida humana es liberarse del enredo material. Hay muchos métodos para alcanzar esa liberación (tapasā brahmacaryeṇa śamena ca damena ca), pero todos ellos, en mayor o menor grado, dependen de la tapasya, la austeridad, que comienza con el celibato. Śukadeva Gosvāmī dice que las personas vāsudeva-parāyaṇa, aquellos que se han entregado por completo a los pies de loto del Señor Vāsudeva, Kṛṣṇa, obtienen de manera natural los resultados de mauna (silencio), vrata (votos), etc., por el simple hecho de empeñarse en servicio devocional. En otras palabras, esos métodos no son tan poderosos. El que emprende la senda del servicio devocional sigue todos esos métodos sin dificultad.
Mauna, por ejemplo, no significa simplemente que haya que dejar de hablar. La lengua está hecha para hablar, aunque a veces haya personas que permanecen en silencio para llamar la atención. Muchas personas guardan voto de silencio un día por semana. Los vaiṣṇavas, sin embargo, no siguen esa práctica. Silencio significa no decir tonterías. Por lo general, los oradores de las asambleas, conferencias y reuniones dicen tantas tonterías que son como sapos croando. Según Śrīla Rūpa Gosvāmī, eso se denomina vāco vegam. Deseamos decir algo para demostrar que somos grandes oradores, pero mejor que decir tonterías es guardar silencio. Por consiguiente, el método del silencio se recomienda a las personas muy apegadas a decir tonterías. Los no devotos tienen que decir tonterías necesariamente, ya que no tienen el poder de hablar de las glorias de Kṛṣṇa. Por esa razón, todo lo que dicen está bajo la influencia de la energía ilusoria, y se compara al croar de las ranas. Sin embargo, el que habla acerca de las glorias del Señor no necesita guardar silencio. Caitanya Mahāprabhu recomienda: kīrtanīyaḥ sadā hariḥ: Debemos cantar las glorias del Señor las veinticuatro horas del día. No hay razón para guardar silencio, mauna.
Los diez procesos para alcanzar la liberación o progresar en la senda de la liberación no son para los devotos. Kevalayā bhaktyā: Esos diez métodos se siguen de modo natural por el mero hecho de ocuparse en servicio del Señor. Prahlāda Mahārāja explica que esos procesos son recomendables para los ajitendriya, que no pueden dominar sus sentidos. Los devotos, sin embargo, ya han dominado sus sentidos: sarvopādhi-vinirmuktaṁ tat-paratvena nirmalam: El devoto ya está liberado de la contaminación material. Por eso Śrīla Bhaktisiddhānta Sarasvatī Ṭhākura dice:
duṣṭa mana! tumi kisera vaiṣṇava?
pratiṣṭhāra tare, nirjanera ghare,
tava harināma kevala kaitava
Hay muchas personas a las que les gusta cantar el mantra Hare Kṛṣṇa en un lugar silencioso y solitario, pero, sin el interés por predicar y hablar constantemente a los no devotos, la influencia de las modalidades de la naturaleza es muy difícil de superar. Por lo tanto, si una persona no es sumamente avanzada en el estado de conciencia de Kṛṣṇa, no debe imitar a Haridāsa Ṭhākura, que no tenía otra ocupación que cantar el santo nombre las veinticuatro horas del día. Prahlāda Mahārāja no condena ese proceso; lo acepta; lo que ocurre es que esos métodos por sí solos, sin ofrecer servicio activo al Señor, generalmente no bastan para alcanzar la liberación. Alcanzar la liberación no es cuestión de orgullo falso.