Texts 20-21
yatrāvatīrṇo bhagavān
paramātmā narākṛtiḥ
yadoḥ sahasrajit kroṣṭā
nalo ripur iti śrutāḥ
catvāraḥ sūnavas tatra
śatajit prathamātmajaḥ
mahāhayo reṇuhayo
haihayaś ceti tat-sutāḥ
yatra—donde, dinastía en la cual; avatīrṇaḥ—descendió; bhagavān—la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa; paramātmā—que es la Superalma de todas las entidades vivientes; nara-ākṛtiḥ—una persona, con todo el aspecto de un ser humano; yadoḥ—de Yadu;sahasrajit—Sahasrajit; kroṣṭā—Kroṣṭā; nalaḥ—Nala; ripuḥ—Ripu; iti śrutāḥ—así conocidos; catvāraḥ—cuatro; sūnavaḥ—hijos; tatra—allí; śatajit—Śatajit; prathama-ātmajaḥ—de los primeros hijos; mahāhayaḥ—Mahāhaya; reṇuhayaḥ—Reṇuhaya; haihayaḥ—Haihaya; ca—y; iti—así; tat-sutāḥ—sus hijos (los hijos de Śatajit).
La Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, la Superalma que está en el corazón de todas las entidades vivientes, descendió en Su forma original de ser humano en la dinastía o familia de Yadu. Yadu tuvo cuatro hijos, que se llamaron Sahasrajit, Kroṣṭā, Nala y Ripu. Sahasrajit, el mayor de los cuatro, tuvo un hijo, Śatajit, que fue padre de tres hijos: Mahāhaya, Reṇuhaya y Haihaya.
SIGNIFICADO: Como se confirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (1.2.11):
vadanti tat tattva-vidas
tattvaṁ yaj jñānam advayam
brahmeti paramātmeti
bhagavān iti śabdyate
«Los trascendentalistas eruditos que conocen la Verdad Absoluta llaman a esa sustancia no dual Brahman, Paramātmā o Bhagavān». La mayoría de los trascendentalistas solamente comprenden el Brahman impersonal o el Paramātmā localizado, pues es muy difícil entender a la Personalidad de Dios. En el Bhagavad-gītā (7.3), el Señor dice:
manuṣyāṇāṁ sahasreṣu
kaścid yatati siddhaye
yatatām api siddhānāṁ
kaścin māṁ vetti tattvataḥ
«De entre muchos miles de hombres, puede que uno se esfuerce por alcanzar la perfección; y de entre aquellos que han logrado la perfección, difícilmente uno Me conoce en verdad». Los yogīs y los jñānīs, es decir, los yogīs místicos y los impersonalistas, pueden entender la Verdad Absoluta como algo impersonal o localizado. Pero, aunque son almas iluminadas y están por encima de los seres humanos corrientes, no logran comprender que la Suprema Verdad Absoluta pueda ser una persona. Por eso se afirma que, de entre muchos siddhas, es decir, de entre muchas almas que han llegado a percibir la Verdad Absoluta, tal vez haya una que comprenda a Kṛṣṇa, que tiene el mismo aspecto que los seres humanos (narākṛti). Esa forma humana fue explicada por el propio Kṛṣṇa después de manifestar Su virāṭ-rūpa. El virāṭ-rūpa no es la forma original del Señor; la forma original del Señor es Dvibhuja-śyāmasundara, Muralīdhara, el Señor que tiene dos brazos y toca la flauta (yām śyāmasundaram acintya-guṇa-svarūpam). Las formas del Señor son prueba de Sus inconcebibles cualidades. El Señor mantiene infinidad de universos en el espacio de una de Sus respiraciones, y, sin embargo, Se viste con una forma idéntica a la de los seres humanos. Con todo, eso no significa que sea un ser humano. Como en Su forma original tiene el aspecto de un ser humano, los que no están dotados del conocimiento suficiente Le consideran un hombre común. Dice el Señor:
avajānanti māṁ mūḍhā
mānuṣīṁ tanum āśritam
paraṁ bhāvam ajānanto
mama bhūta-maheśvaram
«Los necios se burlan de Mí cuando desciendo con forma humana. No conocen Mi naturaleza trascendental como Señor Supremo de todo cuanto existe» (Bg. 9.11). Por Su naturaleza trascendental, paraṁ bhāvam, el Señor es el Paramātmā omnipresente que vive en lo más hondo del corazón de todas las entidades vivientes; aun así, Su forma es como la del ser humano. La filosofía māyāvāda dice que el Señor es originalmente impersonal, pero que, cuando desciende, adopta una forma humana, y muchas otras formas. La realidad, sin embargo, es que originalmente es como un ser humano, y el Brahman impersonal está formado por los rayos de Su cuerpo (yasya prabhā prabhavato jagad-aṇḍa-koṭi).