Texts 43-45
ahaṁ bhavo yajña ime prajeśā
dakṣādayo ye bhavad-ādayaś ca
svarloka-pālāḥ khagaloka-pālā
nṛloka-pālās talaloka-pālāḥ
gandharva-vidyādhara-cāraṇeśā
ye yakṣa-rakṣoraga-nāga-nāthāḥ
ye vā ṛṣīṇām ṛṣabhāḥ pitṝṇāṁ
daityendra-siddheśvara-dānavendrāḥ
anye ca ye preta-piśāca-bhūta-
kūṣmāṇḍa-yādo-mṛga-pakṣy-adhīśāḥ
yat kiñca loke bhagavan mahasvad
ojaḥ-sahasvad balavat kṣamāvat
śrī-hrī-vibhūty-ātmavad adbhutārṇaṁ
tattvaṁ paraṁ rūpavad asva-rūpam
aham—yo mismo (Brahmājī); bhavaḥ—el Señor Śiva; yajñaḥ—el Señor Viṣṇu; ime—todos estos; prajā-īśāḥ—el padre de los seres vivientes; daṣka-ādayaḥ—Dakṣa, Marīci, Manu, etc.; ye—esos; bhavat—tú mismo; ādayaḥ ca—y los solteros (Sanat-kumāra y sus hermanos); svarloka-pālāḥ—los líderes de los planetas celestiales; khagaloka-pālāḥ—los líderes de los viajeros siderales; nṛloka-pālāḥ—los líderes de la humanidad; talaloka-pālāḥ—los líderes de los planetas inferiores; gandharva—los residentes de Gandharvaloka; vidyādhara—los residentes del planeta Vidyādhara; cāraṇa-īśāḥ—los líderes de los cāraṇas; ye—otros; yakṣa—los yakṣas; rakṣa—demonios; uraga—serpientes; nāga-nāthāḥ—los líderes de Nāgaloka (debajo de la Tierra); ye—otros; vā—también; ṛṣīṇām—de los sabios; ṛṣabhāḥ—los principales; pitṛṇām—de los antepasados; daitya-indra—líderes de los ateos; siddha-īśvara—líderes de los planetas Siddhalokas (viajeros siderales); dānava-indrāḥ—líderes de los no arios; anye—además de ellos; ca—también; ye—esos; preta—muertos; pīśāca—espíritus malignos; bhūta—genios; kūṣmāṇda—un tipo especial de espíritu maligno; yādaḥ—seres acuáticos; mṛga—animales; pakṣi-adhīśāḥ—águilas gigantes; yat—cualquier cosa; kim ca—y todas las cosas; loke—en el mundo; bhagavat—que se posee bhaga o poder extraordinario; mahasvat—de un grado especial; ojaḥ-sahasvat—destreza sensual y mental específica; balavat—que posee fuerza; kṣamāvat—que posee indulgencia; śrī—belleza; hrī—avergonzado de los actos impíos; vibhūti—riquezas; ātmavat—que posee inteligencia; adbhuta—maravilloso; arṇam—raza; tattvam—verdad específica; param—trascendental; rūpavat—como si fuera la forma de; asva-rūpam—no la forma del Señor.
Yo mismo [Brahmā], el Señor Śiva, el Señor Viṣṇu, grandes engendradores de seres vivientes, tales como Dakṣa y Prajāpati, ustedes mismos [Nārada y los Kumāras], semidioses celestiales tales como Indra y Candra, los líderes de los planetas Bhūrloka, los líderes de los planetas terrenales, los líderes de los planetas inferiores, los líderes de los planetas Gandharva, los líderes de los planetas Vidyādhara, los líderes de los planetas Cāraṇaloka, los líderes de los yakṣas, rakṣas y uragas, los grandes sabios, los grandes demonios, los grandes ateos y viajeros siderales, así como los muertos, los espíritus malignos, los satanes, genios, kūṣmāṇḍas, los grandes seres acuáticos, las grandes bestias y los grandes pájaros, etc. —en otras palabras, absolutamente todo aquello que posea, en un grado excepcional, poder, opulencia, destreza mental y perceptiva, fuerza, indulgencia, belleza, modestia, opulencia y buen linaje, con forma o sin ella—, puede que parezca ser la verdad específica y la forma del Señor, pero de hecho no lo es. Ello es tan solo un fragmento de la potencia trascendental del Señor.
SIGNIFICADO: Aquellos que se encuentran en la lista que aquí se da, comenzando con el nombre de Brahmājī, la primera criatura viviente dentro del universo, y descendiendo hasta el Señor Śiva, el Señor Viṣṇu, Nārada y otros poderosos semidioses, hombres, superhombres, sabios, ṛṣis, y otras criaturas inferiores de extraordinaria fuerza y opulencia, entre ellos los muertos, los satanes, los espíritus malignos, los genios, los seres acuáticos, las aves y las bestias, puede que parezcan ser el Señor Supremo, pero de hecho ninguno de ellos lo es; cada uno de ellos posee tan solo un fragmento de las grandes potencias del Señor Supremo. El hombre poco inteligente se sorprende al ver las acciones maravillosas de los fenómenos materiales, al igual que los aborígenes sienten temor de un gran relámpago, de un árbol baniano grande y gigantesco o de una montaña grande y elevada que se encuentre en la jungla. Para esos seres humanos subdesarrollados, tan solo el más ligero despliegue de la potencia del Señor es cautivador. Una persona aún más avanzada queda cautivada por los poderes de los semidioses y diosas. Por lo tanto, a aquellos que simplemente se asombran de los poderes de cualquier cosa que se encuentre en la creación del Señor, y que carecen de información verdadera acerca del propio Señor, se les conoce como śaktas, o adoradores de los grandes poderes. El científico moderno también está cautivado por las maravillosas acciones y reacciones de los fenómenos naturales, y, en consecuencia, también es un śakta. Esas personas de bajo grado se elevan gradualmente hasta volverse surīyas (adoradores del dios del sol), o gāṇapatyas (adoradores de las masas tales como janatā-janārdana o daridra-nārāyaṇa, etc., en la forma de Gaṇapati), y luego se elevan al plano de adorar al Señor Śiva en busca del alma sempiterna, llegando luego a la etapa de adorar al Señor Viṣṇu, la Superalma, etc., sin información alguna acerca de Govinda, el Señor Kṛṣṇa, quien es el Señor Viṣṇu original. Por otra parte, algunos son adoradores de la raza, la nacionalidad, las aves, las bestias, los espíritus malignos, los satanes, etc. La adoración común que se hace de Śanideva, el señor de la condición de infortunio, y Sītalādevī, la diosa de la viruela, es también frecuente entre las masas, y existen muchos hombres tontos que adoran a las masas o a la clase de los hombres pobres. Así que diferentes personas, sociedades y comunidades, etc., adoran a algunas de las potentes manifestaciones del Señor, considerando equivocadamente que el objeto poderoso es Dios. Pero en este verso, Brahmājī advierte que ninguna de ellas es el Señor Supremo; ellas exhiben tan solo «un plumaje prestado» del original y Todopoderoso Señor Śrī Kṛṣṇa. Cuando el Señor aconseja en el Bhagavad-gītā que se lo adore solo a Él, ha de entenderse que el adorar al Señor Kṛṣṇa incluye la adoración de todo lo que se mencionó, debido a que Él, el Señor Kṛṣṇa, los abarca a todos.
Cuando en las Escrituras védicas se dice que el Señor no tiene forma, ha de entenderse que todas esas formas que se mencionaron anteriormente, que se encuentran dentro de la experiencia del conocimiento universal, son tan solo diferentes exhibiciones de las trascendentales potencias del Señor, y ninguna de ellas representa de hecho la forma trascendental del Señor. Pero cuando el Señor verdaderamente desciende a la Tierra o a cualquier parte del universo, la clase de los hombres poco inteligentes también considera equivocadamente que Él es uno de ellos, y, así pues, ellos imaginan que la Trascendencia no tiene forma o es impersonal. De hecho, el Señor no carece de forma, ni tampoco pertenece a ninguna de las múltiples formas que se experimentan dentro de las formas universales. Uno debe tratar de conocer la verdad acerca del Señor, siguiendo la instrucción de Brahmājī.