Text 16
tenettham āhataḥ kṣattar
bhagavān ādi-sūkaraḥ
nākampata manāk kvāpi
srajā hata iva dvipaḥ
tena—por Hiraṇyākṣa; ittham—de este modo; āhataḥ—golpeado; kṣattaḥ—¡oh, Vidura!; bhagavān—la Suprema Personalidad de Dios; ādi-sūkaraḥ—el primer jabalí; na akampata—no sintió estremecimiento; manāk—ni ligeramente; kva api—en ningún lugar; srajā—por un collar de flores; hataḥ—golpeado; iva—como; dvipaḥ—un elefante.
Golpeado de este modo por el demonio, ¡oh, Vidura!, el Señor, que había aparecido como el primer jabalí, no sintió en ninguna parte de Su cuerpo el menor estremecimiento, tal como un elefante que es golpeado con un collar de flores.
SIGNIFICADO: Como anteriormente se explicó, en origen el demonio era un servidor del Señor en Vaikuṇṭha, pero, de una u otra manera, cayó como demonio. La finalidad de su lucha con el Señor Supremo era su liberación. El Señor gozó de los golpes en Su cuerpo trascendental, tal como un padre perfectamente adulto que pelea con su hijo. A veces un padre se recrea peleándose en broma con su hijo pequeño, y, del mismo modo, el Señor sintió que los golpes de Hiraṇyākṣa en Su cuerpo eran como flores que se Le ofrecían en adoración. En otras palabras, el Señor deseaba luchar para gozar de Su bienaventuranza trascendental; así pues, disfrutó del ataque.