Text 48
samyag-darśanayā buddhyā
yoga-vairāgya-yuktayā
māyā-viracite loke
caren nyasya kalevaram
samyak-darśanayā—dotado de visión correcta; buddhyā—por medio de la razón; yoga—mediante el servicio devocional; vairāgya—mediante el desapego; yuktayā—fortalecido; māyā-viracite—dispuesto por māyā; loke—a este mundo; caret—debe marchar; nyasya—relegando; kalevaram—el cuerpo.
Dotados de visión correcta y fortalecidos con el servicio devocional y con una actitud pesimista al respecto de la identidad material, debemos relegar el cuerpo a este mundo ilusorio por medio de la razón. De este modo, podremos ser indiferentes al mundo material.
SIGNIFICADO: Es frecuente el error de comprensión de que, si tenemos que relacionarnos con personas ocupadas en servicio devocional, no podremos resolver el problema económico. Para dar respuesta a ese argumento, el verso explica que tenemos que relacionarnos con personas liberadas, pero no directa, físicamente, sino entendiendo, por medio de la filosofía y la lógica, los problemas de la vida. Aquí se afirma: samyag-darśanayā buddhyā: Debemos ver perfectamente, y, mediante la inteligencia y la práctica yóguica, tenemos que renunciar al mundo. Esa renunciación puede conseguirse por medio del proceso recomendado en el segundo capítulo del Primer Canto del Śrīmad-Bhāgavatam.
La inteligencia del devoto está siempre en contacto con la Suprema Personalidad de Dios. Su actitud hacia la existencia material es de desapego, pues sabe perfectamente bien que el mundo material es una creación de la energía ilusoria. Comprendiendo que su propio ser es parte integral del Alma Suprema, el devoto desempeña su servicio devocional y se mantiene completamente aparte de las acciones y reacciones materiales. De esta manera, al final abandona el cuerpo material, es decir, abandona la energía material, y como alma pura, entra en el reino de Dios.
Así terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo trigesimoprimero del Canto Tercero del Śrīmad-Bhāgavatam, titulado: «Las enseñanzas del Señor Kapila sobre los movimientos de las entidades vivientes».