Text 29
nimitte sati sarvatra
jalādāv api pūruṣaḥ
ātmanaś ca parasyāpi
bhidāṁ paśyati nānyadā
nimitte—debido a causas; sati—que son; sarvatra—en todas partes; jala-ādau api—agua y otros elementos reflectantes; pūruṣaḥ—la persona; ātmanaḥ—uno mismo; ca—y; parasya api—el ser de otro; bhidām—diferenciación; paśyati—ve; na anyadā—no hay otra razón.
La diversidad de causas es la única razón de que una persona vea diferencias entre ella misma y las demás, de la misma manera que un cuerpo parece distinto según si se refleja en el agua, en aceite o en un espejo.
SIGNIFICADO: El alma espiritual es una, la Suprema Personalidad de Dios. Él Se manifiesta en expansiones svāṁśa y vibhinnāṁśa. Las jīvas son expansiones vibhinnāṁśa. Las diversas encarnaciones de la Suprema Personalidad de Dios son expansiones svāṁśa. Así pues, el Señor Supremo tiene diversas potencias, y esas diversas potencias tienen diversas expansiones. De esa manera, debido a la diversidad de razones, un mismo principio, la Suprema Personalidad de Dios, tiene diversidad de expansiones. Entender esto es conocimiento real, pero la entidad viviente cubierta por upādhi, el cuerpo con identificaciones falsas, ve diferencias. Es lo mismo que ocurre cuando vemos nuestro reflejo en el agua, en aceite o en un espejo. El reflejo de una cosa en agua, parece moverse; su reflejo en hielo, parece fijo; en aceite, tiene un aspecto desvaído. Es un mismo objeto, pero en circunstancias distintas presenta distintos aspectos. Si eliminamos el determinante cualitativo, todo se reduce a uno. En otras palabras, aquel que, mediante la práctica del bhakti-yoga, llega al nivel de paramahaṁsa, que es la etapa perfecta de la vida, ve únicamente a Kṛṣṇa en todas partes. Ese es su único objetivo.
En conclusión, la diversidad de causas es la razón de que se pueda ver a la entidad viviente en diferentes formas, bien sea como animal, ser humano, semidiós, árbol, etc. En realidad, toda entidad viviente es la potencia marginal del Señor Supremo. Por esa razón, en el Bhagavad-gītā (5.18) se explica que el que realmente ve el espíritu no hace diferencia entre un brāhmaṇa erudito y un perro, entre un elefante y una vaca. Paṇḍitāḥ sama-darśinaḥ: el que de verdad es erudito solo ve a la entidad viviente, y no la cubierta externa. Por lo tanto, las diferencias son el resultado de las diferencias en el karma, las actividades fruitivas, y cuando dejamos de ejecutar actividades fruitivas, convirtiéndolas en actos de devoción, podemos entender que todos somos iguales, sin tener en cuenta las formas. Esto solo es posible en el estado de conciencia de Kṛṣṇa. En este movimiento participan hombres de todas partes del mundo y de muchas razas distintas, pero como se consideran sirvientes de la Suprema Personalidad de Dios, no hacen diferencias entre blanco y negro, amarillo y rojo. Por consiguiente, el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa en el único medio de liberar a las entidades vivientes de todas las identificaciones falsas.