Text 5
pracetasa ūcuḥ
svāgataṁ te surarṣe ’dya
diṣṭyā no darśanaṁ gataḥ
tava caṅkramaṇaṁ brahmann
abhayāya yathā raveḥ
pracetasaḥ ūcuḥ—los Pracetās dijeron; su-āgatam—bienvenida; te—a ti; sura-ṛṣe—¡oh, sabio entre los semidioses!; adya—hoy; diṣṭyā—por buena fortuna; naḥ—de nosotros; darśanam—audiencia; gataḥ—tú has venido; tava—tus; caṅkramaṇam—movimientos; brahman—¡oh, gran brāhmaṇa!; abhayāya—para liberar del temor; yathā—como; raveḥ—el sol.
Todos los Pracetās se dirigieron entonces al gran sabio Nārada: ¡Oh, gran sabio!, ¡oh, brāhmaṇa! Esperamos que no hayas pasado dificultades para llegar hasta aquí. Somos muy afortunados de poder verte. El sol, con su viaje, alivia a la gente del temor que sienten en la oscuridad de la noche debido a la presencia de ladrones y bandidos. De la misma manera, tu viajar es como el del sol, pues alejas todos nuestros temores.
SIGNIFICADO: La oscuridad de la noche hace que todo el mundo sienta temor de los ladrones y maleantes, especialmente en las grandes ciudades. A menudo la gente tiene miedo de salir a la calle; incluso en una gran ciudad como Nueva York, sabemos que a la gente no le gusta salir a la calle de noche. En mayor o menor medida, por la noche todo el mundo tiene miedo, tanto en la ciudad como en los pueblos. Sin embargo, tan pronto como sale el sol, todos se sienten aliviados. De manera similar, el mundo material es oscuro por naturaleza. Todo el mundo teme algún peligro a cada instante; sin embargo, cuando vemos a un devoto como Nārada, todos los temores desaparecen. Del mismo modo que el sol dispersa la oscuridad, la aparición de un gran sabio como Nārada dispersa la ignorancia. En presencia de Nārada o de su representante, el maestro espiritual, nos liberamos por completo de la ansiedad que viene de la ignorancia.