Text 14
tāṁs tān vipannān sa hi tatra tatra
vihāya jātaṁ parigṛhya sārthaḥ
āvartate ’dyāpi na kaścid atra
vīrādhvanaḥ pāram upaiti yogam
tān tān—todos ellos; vipannān—con diversas dificultades; saḥ—el ser vivo; hi—ciertamente; tatra tatra—aquí y allá;vihāya—abandonar; jātam—los recién nacidos; parigṛhya—llevando; sa-arthaḥ—el ser vivo que busca su propio interés;āvartate—vaga por el bosque; adya api—incluso hasta ahora; na—no; kaścit—ninguno de ellos; atra—aquí, en este bosque; vīra—¡oh, héroe!; adhvanaḥ—de la senda de la vida material; pāram—el fin supremo; upaiti—obtiene; yogam—el proceso del servicio devocional a la Suprema Personalidad de Dios.
Mi querido rey, en los senderos del bosque de la vida material, la persona se ve privada de sus padres, y cuando ellos mueren, se apega a los hijos recién nacidos. De ese modo, vaga por la senda del progreso material y siempre le llega un momento en que se encuentra en dificultades. Aun así, nadie sabe cómo salir de esa situación, ni siquiera en el momento de la muerte.
SIGNIFICADO: En el mundo material, la familia es la institución de la vida sexual. Yan maithunādi-gṛhamedhi-sukham(Bhāg. 7.9.45). Mediante la relación sexual, los padres engendran hijos, quienes, a su vez, se casan para seguir el mismo sendero de vida sexual. Tras la muerte de los padres, los hijos se casan y conciben sus propios hijos. De ese modo, la vida sigue su curso generación tras generación, sin que nadie logre liberarse de las dificultades de la vida material. Nadie acepta los procesos espirituales de conocimiento y renunciación que culminan en el bhakti-yoga, cuando de hecho el conocimiento y la renunciación, jñāna y vairāgya, son la finalidad de la vida humana, los medios mediante los cuales se puede llegar al plano del servicio devocional. Desafortunadamente, en esta era la gente evita la compañía de personas liberadas (sādhu-saṅga) y sigue adelante con su estereotipado modo de vida familiar. Debido a ello, los intercambios sexuales y monetarios les ponen en dificultades.