Text 12
yasyāsti bhaktir bhagavaty akiñcanā
sarvair guṇais tatra samāsate surāḥ
harāv abhaktasya kuto mahad-guṇā
manorathenāsati dhāvato bahiḥ
yasya—de quien; asti—hay; bhaktiḥ—servicio devocional; bhagavati—a la Suprema Personalidad de Dios; akiñcanā—sin ninguna motivación; sarvaiḥ—con todas; guṇaiḥ—buenas cualidades; tatra—allí (en esa persona); samāsate—moran; surāḥ—todos los semidioses; harau—a la Suprema Personalidad de Dios; abhaktasya—de una persona que no es devota; kutaḥ—dónde; mahat-guṇāḥ—buenas cualidades; manorathena—por especulación mental; asati—en el mundo material, que es temporal; dhāvataḥ—que corre; bahiḥ—fuera.
En el cuerpo de aquel que ha adquirido devoción pura por la Suprema Personalidad de Dios, Vāsudeva, se manifiestan todos los semidioses con sus sublimes cualidades, como la religión, el conocimiento y la renunciación. Por otra parte, una persona sin servicio devocional y ocupada en actividades materiales, no tiene buenas cualidades. Incluso si es un adepto de la práctica del yoga místico, o está empeñado en el honesto esfuerzo de mantener a su familia y a sus parientes, es seguro que será arrastrado por sus propias especulaciones mentales y tendrá que ocuparse en el servicio de la energía externa del Señor. ¿Qué buenas cualidades puede haber en esa persona?
SIGNIFICADO: Como se explica en el siguiente verso, Kṛṣṇa es la fuente original de todas las entidades vivientes. El propio Kṛṣṇa lo confirma en el Bhagavad-gītā (15.7) con las siguientes palabras:
mamaivāṁśo jīva-loke
jīva-bhūtaḥ sanātanaḥ
manaḥ ṣaṣṭhānīndriyāṇi
prakṛti-sthāni karṣati
«Las entidades vivientes de este mundo condicionado son Mis partes fragmentarias eternas. Debido a la vida condicionada, sostienen una ardua lucha con los seis sentidos, entre los que se incluye la mente». Todas las entidades vivientes son partes integrales de Kṛṣṇa, y por lo tanto, cuando recuperan su conciencia de Kṛṣṇa original, manifiestan, en pequeña proporción, todas las buenas cualidades de Kṛṣṇa. Cuando alguien se ocupa en los nueve procesos del servicio devocional (śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ smaraṇaṁ pāda-sevanam/ arcanaṁ vandanaṁ dāsyaṁ sakhyam ātma-nivedanam), su corazón se purifica; esa persona entiende inmediatamente su relación con Kṛṣṇa y recupera su cualidad original de ser consciente de Kṛṣṇa.
En el capítulo ocho del Ādi-līlā del Caitanya-caritāmṛta, se describen algunas de las cualidades de los devotos. De Śrī Paṇḍita Haridāsa, por ejemplo, se dice que tenía muy buena conducta y era tolerante, pacífico, magnánimo y grave. Además de eso, hablaba con gran dulzura, y se esforzaba en complacer a los demás; era siempre paciente y respetuoso con todos, y siempre trabajó por el beneficio de todos; en su mente no había duplicidad, y estaba libre por completo de malicia. En origen, todas esas cualidades pertenecen a Kṛṣṇa, pero, de modo natural, se manifiestan también en la persona que se hace devota. Śrī Kṛṣṇadāsa Kavirāja, el autor del Caitanya-caritāmṛta, dice que en el cuerpo del vaiṣṇava se manifiestan todas las buenas cualidades, y que solo por la presencia de esas buenas cualidades se puede distinguir a un vaiṣṇava de un no vaiṣṇava. Kṛṣṇadāsa Kavirāja da la siguiente lista de veintiséis cualidades del vaiṣṇava: (1) Es muy bondadoso con todos. (2) No es enemigo de nadie. (3) Es veraz. (4) Es ecuánime. (5) Nadie puede encontrarle defectos. (6) Es magnánimo. (7) Es manso. (8) Es siempre limpio. (9) Carece de posesiones. (10) Trabaja por el bien de todos. (11) Es muy pacífico. (12) Siempre está entregado a Kṛṣṇa. (13) No tiene deseos materiales. (14) Es muy manso. (15) Es estable. (16) Controla sus sentidos. (17) No come más de lo necesario. (18) No está bajo la influencia de la energía ilusoria del Señor. (19) Ofrece respeto a todos. (20) No desea ningún respeto para él. (21) Es muy grave. (22) Es misericordioso. (23) Es amistoso. (24) Es poético. (25) Es experto. (26) Es silencioso.