Text 31
vikarṣato ’ntar hṛdayād
dāsī-patim ajāmilam
yama-preṣyān viṣṇudūtā
vārayām āsur ojasā
vikarṣataḥ—arrancar; antaḥ hṛdayāt—de dentro del corazón; dāsī-patim—al esposo de la prostituta; ajāmilam—Ajāmila; yama-preṣyān—los mensajeros de Yamarāja; viṣṇu-dūtāḥ—los sirvientes del Señor Viṣṇu; vārayām āsuḥ—prohibieron; ojasā—con voces resonantes.
Los enviados de Yamarāja estaban arrancando el alma de lo más hondo del corazón de Ajāmila, el esposo de la prostituta, pero los mensajeros del Señor Viṣṇu, los viṣṇudūtas, se lo prohibieron con voces resonantes.
SIGNIFICADO: El vaiṣṇava, la persona que se ha entregado a los pies de loto del Señor Viṣṇu, es siempre protegido por los mensajeros del Señor Viṣṇu. En el mismo instante en que Ajāmila cantó el santo nombre de Nārāyaṇa, los viṣṇudūtas aparecieron en el lugar y ordenaron a los yamadūtas que no le tocasen. Con sus resonantes voces, los viṣṇudūtas amenazaron a los yamadūtas con castigarles si persistían en su intento de arrancar el alma de Ajāmila del corazón. Los mensajeros de Yamarāja tienen jurisdicción sobre todas las entidades vivientes pecaminosas, pero los mensajeros del Señor Viṣṇu, los viṣṇudūtas, pueden castigar a cualquiera que haga daño a un vaiṣṇava, aun si se trata del propio Yamarāja.
Los científicos materialistas, con sus instrumentos materiales, no saben dar con la posición del alma dentro del cuerpo, pero este verso explica claramente que el alma está en lo más profundo del corazón (hṛdaya); del corazón es de donde losyamadūtas estaban extrayendo el alma de Ajāmila. De manera similar, sabemos que la Superalma, el Señor Viṣṇu, también está dentro del corazón (īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe 'rjuna tiṣṭhati). En los Upaniṣads se dice que la Superalma y el alma individual viven en el mismo árbol, el cuerpo, como dos pájaros amigos. La Suprema Personalidad de Dios es tan bondadoso con el alma original que, cuando esta transmigra de un cuerpo a otro, el Señor va con ella. Por eso se dice que la Superalma es un amigo. Además, conforme al deseo y al karma del alma individual, el Señor, por medio de la acción demāyā, le crea otro cuerpo.
En el cuerpo, el corazón es un dispositivo mecánico. En el Bhagavad-gītā (18.61) el Señor explica:
īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ
hṛd-deśe ’rjuna tiṣṭhati
bhrāmayan sarva-bhūtāni
yantrārūḍhāni māyayā
«El Señor Supremo Se encuentra en el corazón de todos, ¡oh, Arjuna!, y dirige los movimientos de todas las entidades vivientes, que están situadas como en una máquina hecha de energía material». Yantra se refiere a una máquina, como, porejemplo, un automóvil. El conductor de la máquina del cuerpo es el alma individual, quien es, además, su director o propietario, pero el propietario supremo es la Suprema Personalidad de Dios. Nuestro cuerpo ha sido creado a través de la acción demāyā (karmaṇā daiva-netreṇa), y nuestras actividades en esta vida determinan la creación de otro vehículo, también bajo la supervisión de daivī māyā (daivī hy eṣā guṇa-mayī mama māyā duratyayā). Cuando llega el momento, se decide de inmediato nuestro siguiente cuerpo, y tanto el alma individual como la Superalma pasan a esa determinada máquina corporal. Ese es el proceso de transmigración. Durante la transmigración de un cuerpo al siguiente, el alma es llevada por los mensajeros de Yamarāja y puesta en un determinado tipo de vida infernal (naraka), a fin de que se acostumbre a las condiciones de vida de su siguiente cuerpo.