Text 44
sambhavanti hi bhadrāṇi
viparītāni cānaghāḥ
kāriṇāṁ guṇa-saṅgo ’sti
dehavān na hy akarma-kṛt
sambhavanti—hay; hi—en verdad; bhadrāṇi—actividades piadosas, auspiciosas; viparītāni—todo lo contrario (actividades pecaminosas, no auspiciosas); ca—también; anaghāḥ—¡oh, intachables habitantes de Vaikuṇṭha!; kāriṇām—de los trabajadores fruitivos; guṇa-saṅgaḥ—contaminación de las tres modalidades de la naturaleza; asti—hay; deha-vān—todo el que ha recibido este cuerpo material; na—no; hi—en verdad; akarma-kṛt—sin realizar actividades.
¡Oh, habitantes de Vaikuṇṭha!, ustedes son intachables, pero los que habitan en el mundo material, tanto si son piadosos como si realizan actividades impías, son todos karmīs. Como están contaminados por las tres modalidades de la naturaleza y tienen que actuar conforme a ellas, pueden realizar actividades tanto de un tipo como de otro. Quien ha recibido un cuerpo material no puede estar inactivo, y para quien actúa bajo las modalidades de la naturaleza material, la acción pecaminosa es inevitable. Por lo tanto, todas las entidades vivientes del mundo material merecen ser castigadas.
SIGNIFICADO: La diferencia entre los seres humanos y los no humanos está en que del ser humano se espera un comportamiento acorde a los mandatos de los Vedas. Por desdicha, los hombres se inventan sus propias maneras de actuar, sin tener en cuenta los Vedas. Por esa razón, todos ellos incurren en actos pecaminosos y merecen ser castigados.