Text 41
śarat-padmotsavaṁ vaktraṁ
vacaś ca śravaṇāmṛtam
hṛdayaṁ kṣura-dhārābhaṁ
strīṇāṁ ko veda ceṣṭitam
śarat—en el otoño; padma—una flor de loto; utsavam—que florece; vaktram—rostro; vacaḥ—palabras; ca—y; śravaṇa—al oído; amṛtam—que dan placer; hṛdayam—corazón; kṣura-dhārā—el filo de una navaja; ābham—como; strīṇām—de mujeres; kaḥ—quién; veda—conoce; ceṣṭitam—la conducta.
El rostro de la mujer es hermoso y atrayente como un loto florecido en otoño; sus palabras son muy dulces, y dan placer al oído; pero, si analizamos su corazón, veremos que es tan cortante como el filo de una navaja. En esas circunstancias, ¿quién puede entender la conducta de una mujer?
SIGNIFICADO: Kaśyapa Muni hace ahora una descripción muy clara de la mujer desde el punto de vista materialista. A las mujeres se las conoce generalmente como el sexo bello, y, sobre todo en su juventud, cuando tienen dieciséis o diecisiete años, son muy atractivas para los hombres. Por lo tanto, el rostro de la mujer se compara a la flor de loto que se abre en otoño. Como la flor de loto en el otoño, la mujer en el umbral de la belleza juvenil es extraordinariamente atractiva. En sánscrito, la voz de la mujer recibe el nombre de nārī-svara, pues las mujeres suelen cantar, y su canto es muy atractivo. En la actualidad son muy bien consideradas las artistas de cine, sobre todo las que cantan. Algunas ganan fabulosas cantidades de dinero por el simple hecho de cantar. Por lo tanto, como enseña Śrī Caitanya Mahāprabhu, el canto de la mujer es peligroso, pues puede provocar la caída de un sannyāsī. Sannyāsa significa abandonar la compañía de mujeres, pero, si un sannyāsī escucha la voz de una mujer y ve su hermoso rostro, ciertamente se sentirá atraído, y su caída es segura. Los ejemplos abundan. Incluso el gran sabio Viśvāmitra cayó víctima de Menakā. Por lo tanto, la persona que desee avanzar en el cultivo de conciencia espiritual debe cuidarse mucho de ver el rostro y escuchar la voz de las mujeres. Para brahmacārīs y sannyāsīs, admirar la hermosura del rostro de una mujer o el timbre de su voz al cantar, son caídas sutiles. Esta descripción de los rasgos de la mujer por parte de Kaśyapa Muni es muy instructiva.
Una mujer de cuerpo atractivo, rostro hermoso y voz dulce, es, por naturaleza, una trampa para el hombre. Los śāstras nos advierten de que una mujer así, cuando ofrece servicios a un hombre, debe ser considerada un pozo tapado por la hierba. En el campo hay muchos pozos ocultos; un hombre que no sepa de su existencia, pisará la hierba y caerá en el pozo. Hay muchas instrucciones como esta. Puesto que la atracción del mundo material se basa en la atracción por las mujeres, Kaśyapa Muni pensó: «En esas circunstancias, ¿quién puede entender el corazón de una mujer?». Cāṇakya Paṇḍita también nos advierte: viśvāso naiva kartavyaḥ strīṣu rāja-kuleṣu ca: «Hay dos personas en las que no se debe confiar: el político y la mujer». Se trata, por supuesto, de mandamientos de los śāstras autorizados, de modo que debemos ser muy prudentes en nuestras relaciones con mujeres.
A veces se critica a nuestro movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa por admitir hombres y mujeres, pero el proceso de conciencia de Kṛṣṇa es para todos, sin distinción entre hombres y mujeres. El Señor Kṛṣṇa dice personalmente: striyo vaiśyās tathā śūdrās te 'pi yānti parāṁ gatim: Todo el que siga estrictamente las instrucciones del maestro espiritual y de los śāstras, sea mujer, śūdra, vaiśya o, por supuesto, brāhmaṇa o kṣatriya, puede ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Por esa razón, pedimos a todos los miembros del movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa, hombres y mujeres, que no se dejen atraer por el aspecto del cuerpo, sino únicamente por Kṛṣṇa. De ese modo, todo irá bien. De lo contrario, será peligroso.