Text 44
sākaṁ vihāyasā vipro
mahāpuruṣa-kiṅkaraiḥ
haimaṁ vimānam āruhya
yayau yatra śriyaḥ patiḥ
sākam—por; vihāyasā—por la senda del espacio, o las rutas celestiales; vipraḥ—el brāhmaṇa (Ajāmila); mahāpuruṣa-kiṅkaraiḥ—con los mensajeros del Señor Viṣṇu; haimam—hecho de oro; vimānam—a un avión; āruhya—subir; yayau—fue; yatra—donde; śriyaḥ patiḥ—el Señor Viṣṇu, el esposo de la diosa de la fortuna.
En compañía de los mensajeros del Señor Viṣṇu, Ajāmila se subió a un avión de oro. Surcando las rutas del espacio, fue directamente a la morada del Señor Viṣṇu, el esposo de la diosa de la fortuna.
SIGNIFICADO: Los científicos materialistas llevan muchos años tratando de ir a la Luna, pero todavía no han podido conseguirlo. Sin embargo, los aviones espirituales de los planetas espirituales pueden llevarnos de regreso al hogar, de vuelta a Dios, en un segundo. No podemos ni imaginar la velocidad de esos aviones espirituales. El espíritu es más sutil que la mente, y todo el mundo sabe por propia experiencia lo rápido que la mente viaja de un lugar a otro. Por lo tanto, la única manera de imaginar la rapidez de la forma espiritual es compararla con la velocidad de la mente. El devoto perfecto puede ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios, inmediatamente después de abandonar el cuerpo material, en menos de un instante.