Text 63
te ’surā hy api paśyanto
na nyaṣedhan vimohitāḥ
tad vijñāya mahā-yogī
rasa-pālān idaṁ jagau
smayan viśokaḥ śokārtān
smaran daiva-gatiṁ ca tām
te—aquellos; asurāḥ—demonios; hi—en verdad; api—aunque; paśyantaḥ—viendo (el ternero y la vaca bebiendo el néctar); na—no; nyaṣedhan—les prohibieron; vimohitāḥ—confundidos por la ilusión; tat vijñāya—sabiendo esto perfectamente; mahā-yogī—el gran místico Maya Dānava; rasa-pālān—a los demonios que guardaban el néctar; idam—esto; jagau—dijo; smayan—confundidos; viśokaḥ—que no se sentían felices;śoka-ārtān—con grandes lamentos; smaran—recordar; daiva-gatim—poder espiritual; ca—también; tām—ese.
Los demonios podían ver el ternero y la vaca, pero, debido a la ilusión creada por la energía de la Suprema Personalidad de Dios, no acertaban a detenerles. El gran místico Maya Dānava era consciente de que el ternero y la vaca se estaban bebiendo el néctar, y comprendió que ese era el invisible poder de la providencia. Entonces habló a los demonios, que se lamentaban llenos de pesar.