Texts 32-33
prāṇāpānau sannirundhyāt
pūra-kumbhaka-recakaiḥ
yāvan manas tyajet kāmān
sva-nāsāgra-nirīkṣaṇaḥ
yato yato niḥsarati
manaḥ kāma-hataṁ bhramat
tatas tata upāhṛtya
hṛdi rundhyāc chanair budhaḥ
prāṇa—aliento que entra; apānau—aliento que sale; sannirundhyāt—debe detener; pūra-kumbhaka-recakaiḥ—por inspirar, espirar y retener, que, técnicamente, reciben los nombres de pūraka, kumbhaka yrecaka; yāvat—mientras; manaḥ—la mente; tyajet—debe abandonar; kāmān—todos los deseos materiales;sva—la propia; nāsa-agra—la punta de la nariz; nirīkṣaṇaḥ—mirando a; yataḥ yataḥ—de cualquier cosa o lugar; niḥsarati—retrae; manaḥ—la mente; kāma-hatam—vencida por los deseos de disfrute; bhramat—vagar; tataḥ tataḥ—de aquí y de allá; upāhṛtya—después de traerla de vuelta; hṛdi—en lo profundo del corazón; rundhyāt—debe confinar (a la mente); śanaiḥ—gradualmente, con la práctica; budhaḥ—el yogīerudito.
Sin desviar la vista de la punta de la nariz, el yogī erudito practica los ejercicios respiratorios mediante las técnicas denominadas pūraka, kumbhaka y recaka, controlando la inspiración y la espiración, para después detenerlas. De ese modo, el yogī aleja su mente de los apegos materiales y abandona todos los deseos mentales. Tan pronto como la mente, vencida por los deseos de disfrute, se desvíe hacia sentimientos de complacencia sensorial, el yogī debe traerla de vuelta inmediatamente y confinarla en lo más profundo del corazón.
SIGNIFICADO: En este verso se explica en pocas palabras la práctica del yoga. Cuando esa práctica de yogaes perfecta, podemos ver a la Superalma, el aspecto Paramātmā de la Suprema Personalidad de Dios, en lo más profundo del corazón. Sin embargo, en el Bhagavad-gītā (6.47), el Señor Supremo dice:
yoginām api sarveṣām
mad-gatenāntarātmanā
śraddhāvān bhajate yo māṁ
sa me yuktatamo mataḥ
«De todos los yogīs, aquel que tiene una gran fe y siempre mora en Mí, piensa en Mí y Me ofrece servicio amoroso trascendental, es el que está más íntimamente unido a Mí en yoga y es el más elevado de todos. Esa es Mi opinión». El devoto puede volverse inmediatamente un yogī perfecto, gracias a su práctica de mantener siempre a Kṛṣṇa en lo más hondo del corazón. Esa es otra manera de practicar yoga fácilmente. El Señor dice:
man-manā bhava mad-bhakto
mad-yājī māṁ namaskuru
«Piensa siempre en Mí, sé Mi devoto, adórame y ofréceme tu homenaje» (Bg. 18.65). Aquel que practica servicio devocional manteniendo siempre a Kṛṣṇa en lo más hondo del corazón (man-manāḥ) se convierte de inmediato en un yogī de primera categoría. Por otra parte, al devoto no le resulta difícil mantener a Kṛṣṇa dentro de la mente. La práctica del yoga puede servir de ayuda a una persona corriente que está absorta en el concepto corporal de la vida, pero quien emprende directamente el servicio devocional no tendrá dificultad en llegar inmediatamente a la posición de yogī perfecto.