Text 4
yaḥ svātmanīdaṁ nija-māyayārpitaṁ
kvacid vibhātaṁ kva ca tat tirohitam
aviddha-dṛk sākṣy ubhayaṁ tad īkṣate
sa ātma-mūlo ’vatu māṁ parāt-paraḥ
yaḥ—la Suprema Personalidad de Dios, quien; sva-ātmani—en Él; idam—la manifestación cósmica; nija-māyayā—por Su propia potencia; arpitam—dotado;kvacit—a veces, al principio de un kalpa; vibhātam—se manifiesta; kva ca—a veces, en el momento de la aniquilación; tat—esa (manifestación); tirohitam—no visible; aviddha-dṛk—Él lo ve todo (en todas esas circunstancias); sākṣī—el testigo; ubhayam—ambas (manifestación y aniquilación); tat īkṣate—lo ve todo, sin perder nada de vista; saḥ—esa Suprema Personalidad de Dios; ātma-mūlaḥ—autosuficiente, sin ninguna otra causa; avatu—por favor da protección; mām—a mí;parāt-paraḥ—Él es trascendental a lo trascendental, está por encima de toda realidad trascendental.
Con la expansión de Su propia energía, la Suprema Personalidad de Dios hace que la manifestación cósmica permanezca visible, y, a veces, nuevamente invisible. Él es tanto la causa como el resultado supremo, el observador y el testigo, en toda circunstancia. Así, Él es trascendental a todo. Que esa Suprema Personalidad de Dios me dé Su protección.
SIGNIFICADO: La Suprema Personalidad de Dios tiene infinidad de potencias (parāsya śaktir vividhaiva śrūyate). Por lo tanto, en cuanto lo desea, emplea una de Sus potencias, y mediante esa expansión crea la manifestación cósmica. Después de la aniquilación, la manifestación cósmica reposa nuevamente en Él. No obstante, Él es, de modo infalible, el observador supremo. El Señor Supremo permanece inmutable en toda circunstancia. Es un simple testigo y Se mantiene completamente aparte de la creación y de la aniquilación.