TEXT 17
ātma-sambhāvitāḥ stabdhā
dhana-māna-madānvitāḥ
yajante nāma-yajñais te
dambhenāvidhi-pūrvakam
ātma-sambhāvitāḥ—satisfechos de sí mismos; stabdhāḥ—impudentes; dhana-māna—riqueza y prestigio falso; mada—bajo el engaño; anvitāḥ—absortos; yajante—ejecutan sacrificios; nāma—de nombre únicamente; yajñaiḥ—con sacrificios; te—ellos; dambhena—debido al orgullo; avidhi-pūrvakam—sin seguir ninguna regulación disciplinaria.
Creídos de sí mismos y siempre impudentes, engañados por la riqueza y el prestigio falso, a veces ellos ejecutan sacrificios orgullosamente y solo de nombre, sin seguir ninguna regla ni regulación.
SIGNIFICADO: Creyéndose lo máximo que existe, no importándoles ninguna autoridad ni Escritura, las personas demoníacas celebran a veces supuestos sacrificios o ritos religiosos. Y como ellos no creen en la autoridad, son muy impudentes. Esto se debe a la ilusión provocada por la acumulación de un poco de riqueza y prestigio falso. En ocasiones, esos demonios asumen el papel de predicadores, desencaminan a la gente y llegan a ser conocidos como reformadores religiosos o encarnaciones de Dios. Ellos hacen un espectáculo de ejecución de sacrificios, o adoran a los semidioses, o crean su propio Dios. Los hombres comunes los anuncian como Dios y los adoran, y los necios los consideran adelantados en los principios religiosos, o en los principios del conocimiento espiritual. Ellos adoptan el traje de la orden de vida de renuncia y se dedican a toda clase de tonterías con esa ropa. En verdad, para alguien que ha renunciado a este mundo hay muchísimas restricciones. A los demonios, sin embargo, no les importan esas restricciones. Ellos piensan que cualquier senda que uno pueda crear es su propia senda; no existe una senda oficial que haya que seguir, ni nada por el estilo. Aquí se hace especial hincapié en la palabra avidhi-pūrvakam, que significa «desdén por las reglas y regulaciones». Esas cosas siempre se deben a la ignorancia y la ilusión.