Texts 211-212
sītayārādhito vahniś
chāyā-sītām ajījanat
tāṁ jahāra daśa-grīvaḥ
sītā vahni-puraṁ gatā
parīkṣā-samaye vahniṁ
chāyā-sītā viveśa sā
vahniḥ sītāṁ samānīya
tat-purastād anīnayat
sītayā—por madre Sītā; ārādhitaḥ—siendo llamado; vahniḥ—el dios del fuego; chāyā-sītām—la forma ilusoria de madre Sītā; ajījanat—creó; tām—a ella; jahāra—raptó; daśa-grīvaḥ—Rāvaṇa, el de las diez cabezas; sītā—madre Sītā; vahni-puram—a la morada del dios del fuego; gatā—partió; parīkṣā-samaye—en el momento de la prueba; vahnim—en el fuego; chāyā-sītā—la forma ilusoria de Sītā; viveśa—entró; sā—ella; vahniḥ—el dios del fuego; sītām—a la madre Sītā original; samānīya—trayendo de vuelta; tat-purastāt—ante Su presencia; anīnayat—trajo de vuelta.
«A petición de madre Sītā, Agni, el dios del fuego, produjo una forma ilusoria de Sītā, y Rāvaṇa, el de las diez cabezas, raptó a la falsa Sītā. La Sītā original fue entonces a la morada del dios del fuego. Cuando el Señor Rāmacandra sometió a prueba el cuerpo de Sītā, fue la Sītā ilusoria y falsa la que entró en el fuego. En ese momento, el dios del fuego trajo de su morada a la Sītā original y la entregó al Señor Rāmacandra.»
SIGNIFICADO: Estos dos versos se han tomado del Kūrma Purāṇa.