Text 39
yudhiṣṭhira uvāca
nāhaṁ veda gatiṁ pitror
bhagavan kva gatāv itaḥ
ambā vā hata-putrārtā
kva gatā ca tapasvinī
yudhiṣṭhiraḥ uvāca—Mahārāja Yudhiṣṭhira dijo; na—no; aham—yo; veda—lo sé; gatim—partida; pitroḥ—de los tíos; bhagavan—¡oh, personalidad divina!; kva—dónde; gatau—ido; itaḥ—de este lugar; ambā—tía materna; vā—ni; hata-putrā—desprovista de sus hijos; ārtā—afligida; kva—dónde; gatā—ido; ca—también; tapasvinī—asceta.
Mahārāja Yudhiṣṭhira dijo: ¡Oh, personalidad divina!, no sé adónde han ido mis dos tíos. Ni tampoco puedo encontrar a mi asceta tía, que está desconsolada por la pérdida de todos sus hijos.
SIGNIFICADO: Mahārāja Yudhiṣṭhira, como una buena alma y devoto del Señor que era, siempre estuvo consciente de la gran pérdida que había sufrido su tía, y de los padecimientos de asceta de esta. A un asceta nunca lo perturban ninguna clase de sufrimientos, y eso lo vuelve fuerte y determinado en la senda del progreso espiritual. La reina Gāndhārī es un ejemplo típico de una asceta, por el maravilloso carácter que exhibió en muchas situaciones difíciles. Ella fue una mujer ideal como madre, esposa y asceta, y en la historia del mundo es muy difícil encontrar una mujer con un carácter como ese.