Text 37
tattvānāṁ bhagavaṁs teṣāṁ
katidhā pratisaṅkramaḥ
tatremaṁ ka upāsīran
ka u svid anuśerate
tattvānām—de los elementos de la naturaleza; bhagavan—¡oh, gran sabio!; teṣām—de ellos; katidhā—cuántos; pratisaṅkramaḥ—disoluciones; tatra—después; imam—al Señor Supremo; ke—quiénes son; upāsīran—siendo salvados; ke—quiénes son; u—los que; svit—pueden; anuśerate—servir al Señor mientras duerme.
Por favor, describe cuántas disoluciones hay de los elementos de la naturaleza material, y quién sobrevive después de las disoluciones para servir al Señor mientras duerme.
SIGNIFICADO: En la Brahma-saṁhitā (5.47-48) se dice que todas las manifestaciones materiales, con innumerables universos, aparecen y desaparecen con la respiración de Mahā-Viṣṇu, quien yace en yoga-nidrā, el sueño místico:
yaḥ kāraṇārṇava-jale bhajati sma yoga-
nidrām ananta-jagad-aṇḍa-saroma-kūpaḥ
ādhāra-śaktim avalambya parāṁ sva-mūrtiṁ
govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi
yasyaika-niśvasita-kālam athāvalambya
jīvanti loma-vilajā jagad-aṇḍa-nāthāḥ
viṣṇur mahān sa iha yasya kalā-viśeṣo
govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi
«Govinda, la máxima y Suprema Personalidad de Dios [Śrī Kṛṣṇa], yace en el océano Causal, durmiendo de manera ilimitada, para crear ilimitado número de universos durante ese sueño. Yace en el agua mediante Su propia potencia interna, y yo adoro a ese Supremo Dios original.
»En virtud de Su respiración, innumerables universos comienzan a existir, y cuando retira Su respiración, ocurre la disolución de todos los señores de los universos. Esa porción plenaria del Señor Supremo recibe el nombre de Mahā-Viṣṇu, y es una parte de la parte de Śrī Kṛṣṇa. Yo adoro a Govinda, el Señor original».
Después de la disolución de las manifestaciones materiales, el Señor y Su reino, que se encuentran más allá del océano Causal, no desaparecen, ni tampoco los habitantes de ese reino, los compañeros del Señor. Los asociados del Señor son muchísimo más numerosos que las entidades vivientes que han olvidado al Señor debido a la influencia material. La explicación impersonalista que se le da a la palabra aham de los cuatro versos del Bhāgavatam original —aham evāsam evāgre, etc.— se refuta aquí. El Señor y Sus compañeros eternos permanecen después de la disolución. La pregunta que hace Vidura acerca de esas personas es una clara indicación de la existencia de todos los enseres del Señor. Esto también se confirma en el Kāśī-khaṇḍa, tal como lo citan tanto Jīva Gosvāmī como Śrīla Viśvanātha Cakravartī, quienes siguen los pasos de Śrīla Śrīdhara Svāmī:
na cyavante hi yad-bhaktā
mahatyāṁ pralayāpadi
ato ’cyuto ’khile loke
sa ekaḥ sarva-go ’vyayaḥ
«Los devotos del Señor nunca aniquilan sus existencias individuales, ni siquiera después de la disolución de toda la manifestación cósmica. El Señor y los devotos que se relacionan con Él siempre son eternos, tanto en el mundo material como en el mundo espiritual».