Text 41
sunītiḥ suruciś cāsya
mahiṣyau rukma-bhūṣite
āruhya śibikāṁ sārdham
uttamenābhijagmatuḥ
sunītiḥ—la reina Sunīti; suruciḥ—la reina Suruci; ca—también; asya—del rey; mahiṣyau—reinas; rukma-bhūṣite—adornadas con joyas de oro; āruhya—subidas en; śibikām—un palanquín; sārdham—junto con; uttamena—Uttama, el otro hijo del rey; abhijagmatuḥ—todos iban en la procesión.
En la procesión participaban las dos esposas de Mahārāja Uttānapāda, Sunīti y Suruci, junto con su otro hijo, Uttama. Las reinas iban sentadas en un palanquín.
SIGNIFICADO: Cuando Dhruva Mahārāja se fue del palacio, el rey se sintió muy afligido, pero las bondadosas palabras del santo Nārada le proporcionaron un cierto alivio. Pudo entender que su esposa Sunīti era muy afortunada, y que la reina Suruci era muy desdichada, pues, ciertamente, en el palacio se hablaba abiertamente del tema. Aun así, cuando llegaron las noticias del regreso de Dhruva Mahārāja, Sunīti se mostró muy compasiva y, como madre de un gran vaiṣṇava, no dudó en llevar a la otra esposa, Suruci, y a su hijo, Uttama, en su mismo palanquín. Tal era la grandeza de la reina Sunīti, la madre del gran vaiṣṇava Dhruva Mahārāja.