Texts 5-6
sottīrya kūpāt suśroṇī
tam eva cakame kila
tayā vṛtaṁ samudvīkṣya
bahvyo ’jāḥ kānta-kāminīḥ
pīvānaṁ śmaśrulaṁ preṣṭhaṁ
mīḍhvāṁsaṁ yābha-kovidam
sa eko ’javṛṣas tāsāṁ
bahvīnāṁ rati-vardhanaḥ
reme kāma-graha-grasta
ātmānaṁ nāvabudhyata
sā—la cabra; uttīrya—al salir; kupāt—del pozo; su-śroṇī—de muy hermosas ancas; tam—al macho cabrío; eva—en verdad; cakame—deseó aceptar por esposo; kila—en verdad; tayā—por ella; vṛtam—aceptado; samudvīkṣya—al ver; bahvyaḥ—muchas otras; ajāḥ—cabras; kānta-kāminīḥ—deseando que el macho fuese su esposo; pīvānam—muy fuerte y robusto; śmaśrulam—de barba y bigote bien poblados; preṣṭham—de primera categoría; mīḍhvāṁsam—experto en eyacular semen; yābha-kovidam—experto en el arte de la relación sexual; saḥ—aquel macho cabrío; ekaḥ—solo; aja-vṛṣaḥ—el héroe de las cabras; tāsām—de todas las cabras; bahvīnām—en gran cantidad; rati-vardhanaḥ—podía aumentar el deseo lujurioso; reme—disfrutó; kāma-graha-grastaḥ—poseído por el fantasma del deseo lujurioso; ātmānam—su propio ser; na—no; avabudhyata—podía comprender.
Cuando salió del pozo y vio al hermoso macho, aquella cabra de bien formadas ancas lo deseó por esposo. Al igual que ella, muchas otras cabras hembras desearon casarse con aquel macho, pues poseía una bella estructura corporal, barba y bigote bien poblados, y era experto en la eyaculación de semen y en el arte de la relación sexual. Así, con la locura que manifiestan los poseídos por fantasmas, el mejor de los machos cabríos se sintió atraído por todas aquellas cabras y se ocupó en actividades eróticas, olvidando de modo natural su verdadero interés en la autorrealización.
SIGNIFICADO: Ciertamente, los materialistas se sienten muy atraídos por las relaciones sexuales. Yan maithunādi-gṛhamedhi-sukhaṁ hi tuccham. Aunque se casen y traten de apurar hasta la saciedad el disfrute sexual en la vida de gṛhastha, esa satisfacción nunca aparece. El materialista lujurioso es como una cabra, pues se dice que las cabras se entregan al disfrute sexual hasta en el mismísimo matadero antes de morir. El propósito de la vida humana, sin embargo, es la autorrealización.
tapo divyaṁ putrakā yena sattvaṁ
śuddhyed yasmād brahma-saukhyaṁ tv anantam
El propósito de la vida humana es la comprensión del ser, la comprensión del alma espiritual que vive dentro del cuerpo (dehino 'smin yathā dehe). El sinvergüenza materialista no sabe que él no es el cuerpo, sino un alma espiritual que está dentro del cuerpo. Pero su deber es entender su verdadera posición y cultivar el conocimiento que le permita liberarse del enredo material. Como el desdichado que, poseído por fantasmas, se comporta como un loco, el materialista poseído por el fantasma de la lujuria olvida el verdadero propósito de su vida solo por disfrutar de una felicidad falsa bajo la influencia del concepto corporal de la vida.